Iñigo Martínez apunta a Riazor
El de Ondarroa se entrenó ayer con normalidad después de dejar atrás unas molestias en el glúteo y podría debutar contra el Deportivo
La Real Sociedad se enfrentará el próximo domingo, día 10, al Deportivo en el estadio de Riazor y lo hará presumiblemente con Iñigo Martínez en el equipo. El central de Ondarroa se entrenó ayer con total normalidad en Zubieta y ofreció su mejor sonrisa a compañeros y aficionados, que los hubo y muchos, dando a entender que las molestias en el glúteo que tanto le han incordiado a lo largo de este verano, primero en un lado y luego en el otro, ya han quedado atrás. Por fin.
Después de varias jornadas entrenando por su cuenta a un ritmo considerable, el defensa elevó un poco más la exigencia en el regreso a la dinámica de grupo. Participó sin problemas en la parte más física del entrenamiento y después no se arrugó con el balón en las piernas, disputando las acciones de tu a tú con sus compañeros. Ése fue el mejor indicativo para comprender que el de Ondarroa ha vuelto por sus fueros y que su estado físico es bueno. A la conclusión del entrenamiento se tomó su tiempo para firmar a todos los que se lo pidieron, ofreciendo su rostro más sonriente. Iñigo está de vuelta.
Eusebio recupera así a una de las piezas fundamentales de su esquema, aunque no podrá juntar al de Ondarroa con Navas, baja para las próximas semanas. El técnico lasecano tendrá que replantearse la composición del eje de la zaga, donde Aritz cuenta con todas las papeletas para jugar, tal y como ha venido haciendo en las primeras dos jornadas a un nivel notable. Diego Llorente se quedaría en el banquillo a la espera de una oportunidad.
Por lo demás, el de ayer fue un entrenamiento para ver en acción otra vez a Carlos Martínez. El de Lodosa realizó los primeros ejercicios con el resto del grupo después de recibir el alta médica, con mucho físico y algo de balón, aunque se acabó retirando antes del final para continuar con el trabajo en el interior de las instalaciones.
Tampoco Illarramendi completó el entrenamiento, aunque en el caso del mutrikuarra se debió a una medida de precaución al estar algo dolorido. Pardo y Zubeldia, por su parte, se exprimieron al cien por cien junto a Andoni Gorosabel, la única presencia del filial en Zubieta junto al guardameta Zubiaurre. Guevara se ejercitó con el Sanse.
Aplausos al golazo de Pardo
El entrenamiento discurrió sin mayores sobresaltos más allá de un planchazo que recibió Diego Llorente, que le dejó unos segundos cojeando. La cosa no pasó a mayores. Eusebio le dio carpetazo a la sesión con unos partidos en espacio reducido entre equipos de cinco y seis integrantes.
Por un lado, con peto gris, jugaron Pardo, Willian José, Xabi Prieto, Aritz Elustondo, Igor Zubeldia y Kevin Rodrigues. Con peto naranja formaron Zurutuza, Agirretxe, Iñigo, Januzaj, De la Bella y Gorosabel y sin distintivo estuvieron Bautista, Odriozola, Juanmi, Canales y Llorente.
Se vieron varios goles de categoría, entre ellos el de Rubén Pardo, que se sacó un zurdazo lejano directo a la escuadra de Toño. Fue una diana muy celebrada por sus compañeros y por el centenar de aficionados que se acercó a Zubieta en uno de los entrenamientos más concurridos del verano