GOLEADA DE MUNDIAL
España superó a Italia comandada por un Isco estelar y asegura prácticamente su presencia en Rusia el próximo verano Lopetegui prescindió del delantero centro y apostó por un 11 innovador en el que coincidieron seis centrocampistas
La selección española superó a Italia con una contundente victoria en el Santiago Bernabéu y de esta forma se asegura prácticamente la primera plaza del grupo y la clasificación para el Mundial de Rusia del próximo verano. Sin delantero centro, con seis centrocampistas y comandada por un Isco estelar, la Roja fue muy superior a la selección italiana y el Santiago Bernabéu disfrutó con la exhibición de los hombres de Julen Lopetegui.
El seleccionador se había pasado la semana ensayando un once sin delantero centro, con Silva como falso nueve y juntando a seis centrocampistas. Ya dijo en la previa que no había ocultado sus planes y aunque podía sonar a estrategia así fue. Busquets, Iniesta, Koke, Isco, Marco Asensio y David Silva juntos en la misma alineación, con el canario ejerciendo de falso nueve y con Isco y Asensio como falsos extremos. La apuesta de Lopetegui recordaba a la de Del Bosque en la final de la Eurocopa de 2012 o a la de Guardiola ante el Santos en Yokohama en 2011 y ambas también acaba ron con goleada.
Después de un inicio de partido un tanto acelerado por parte de ambos equipos, España fue haciéndose con el control del juego, aunque le costaba superar la elevada presión italiana. La Roja tenía la posesión, aunque no lograba crear ocasiones claras, mientras que Italia, que sin Chiellini aparcó la táctica de los tres centrales, necesitaba muy poco para acercarse al área de De Gea.
La primera ocasión clara llegó a balón parado, pero el lanzamiento de falta de Sergio Ramos se fue ligeramente desviado por encima del marco defendido por Buffon. Unos minutos después, España trenzó una gran jugada, que Italia sólo supo romper con falta después de un pase magistral de Iniesta para Marco Asensio. En esta ocasión fue Isco el que asumió la responsabilidad y su lanzamiento superó por alto a la barrera y también a Buffon, que llegó tarde pese a que el lanzamiento no fue ajustado al palo. Era el minuto 13 y el gol de Isco hacía justicia a lo que se estaba viendo sobre el terreno de juego.
El gol, en lugar de calmar a la selección, tuvo el efecto contrario. Pese a contar con seis centrocampistas, España perdió el balón y llegaron unos minutos de acoso italiano. De Gea estuvo providencial con un paradón tras un remate de cabeza de Bellotti y evitó el gol italiano, pero daba la sensación que el encuentro se estaba equilibrando. Verratti le dio vida a la selección con un pase atrás a Buffon que casi se convierte en un gol en propia puerta y esa jugada despertó a la Roja. En la acción siguiente casi marca Piqué a la salida del córner y a partir de ahí España recuperó el balón y la confianza tras unos minutos de desconcierto.
Volvieron las posesiones largas y la segunda jugada en la que fueron combinando la mayoría de jugadores la culminó de nuevo Isco anotando el segundo tanto de la selección. El malagueño superó a Buffon con la zurda desde fuera del área después de una gran internada de Jordi Alba, culminando una preciosa jugada de la Roja. Con el 2-0 se llegó al descanso y con la sensación de que España ya tenía pie y medio en el Mundial de Rusia.
Italia apenas reaccionó tras el descanso y cuando lo hizo topó de nuevo con De Gea. El portero del Manchester volvió a ser providencial y con otro paradón anuló un remate de Candreva que acabó con la moral de los italianos. A partir de ahí el choque perdió intensidad, por momentos pareció que los dos equipos jugaban caminando y llegó el momento del lucimiento del talento de Silva, Iniesta y especialmente de Isco, la figura de la noche. El malagueño dejó detalles de su calidad y le hizo un caño primero y un sombrero después a Verratti que levantó al público de sus asientos.
Con el partido ya resuelto, Lopetegui recuperó al delantero centro, con la entrada de Morata por un Iniesta que se marchó ovacionado por el Santiago Bernabéu. El de Fuentealbilla demostró que mantiene intacta la calidad y el talento, por si alguien dudaba.
Y la guinda la puso Álvaro Morata que batió a Buffon después de una contra en la que apareció Sergio Ramos ejerciendo de extremo derecho. El delantero aprovechó el centro del capitán para rematar a Italia y certificar, salvo sorpresa mayúscula ante Albania, Lichtensteino Israel, que España estará en el Mundial de Rusia del próximo verano