Etapa corta, dura y explosiva

Jornada exigente hoy con final en la estación invernal de Sierra Nevada (Granada)

Tras la Sierra de la Pandera, la organización ha preparado una etapa corta, dura y explosiva, que incluso el propio Tour de Francia parece haber tomado nota para diseñar sus futuros recorridos. De tan solo 129 kilómetros entre Alcalá la Real y el alto de la Hoya de la Mora en Sierra Nevada.

En 2016, en un escenario de prácticamente idénticas características, Froome se despidió de cualquier opción de pelear por el jersey rojo final. Alberto Contador fue el artífice de aquella emboscada y en la Vuelta.

Una etapa corta, dura y explosiva, con final en Sierra Nevada, de categoría especial, pondrá fin este domingo a la segunda semana de la 72 Vuelta a España.

Con 129,4 kilómetros, la decimoquinta etapa de la carrera española llevará al pelotón desde la localidad jiennense de Alcalá la Real a la estación invernal granadina en una jornada muy exigente en la que se ascenderán también dos puertos de primera categoría.

En el recuerdo de los ciclistas estará la etapa de similares características que en 2016 se disputó en carreteras aragonesas entre Sabiñánigo y la estación invernal de Formigal, que sirvió, con un ataque muy temprano de Alberto Contador (Trek Segafredo), para noquear al británico Chris Froome (Sky) y reducir a la nada sus aspiraciones de hacerse con el jersey rojo.

“Sierra Nevada volverá a ser un día muy duro, además de que las fuerzas ya están muy justas”, dijo ayer Contador. “Sé que voy a contracorriente desde Andorra, pero estoy recuperando tiempo y posiciones. Veremos hasta dónde puedo llegar”. La velocidad prevista por la organización se sitúa entre un máximo de 37 kilómetros por hora y un mínimo de 33 km/h.