CORAZON Y SENTIMIENTO
El Atlético inauguró el Wanda Metropolitano en una jornada emotiva y festiva Todo salió a la perfección en la que ya es la nueva casa de todos los rojiblancos El Rey Felipe VI presidió los actos que acabaron con un gran espectáculo de luz y color
Madrid. 16 de septiembre de 2017. 20.45 horas. El balón echa a rodar por primera vez en el Wanda Metropolitano. Era el acto principal de una jornada histórica para todos los colchoneros, la del estreno de su nueva casa. Pero la fiesta había empezado antes, mucho antes.
A eso de las 11 de la mañana, camisetas rojiblancas comenzaban a verse en los alrededores del campo. Quedaban casi diez horas para que arrancase el encuentro, pero aficionados, curiosos y vecinos ya se congregaban en los aledaños para no perder detalle de todo lo que acontecía.
Media hora después, el club comenzaba con los actos, abriendo las dos fan zone, la del fondo norte, para niños y familias, y la del fondo sur, para gente joven. La enorme bandera izada el viernes y el Paseo de las Leyendas eran dos de los mayores alicientes de la primera visita al estadio para todos los seguidores.
Muchos de los que acudieron lo hicieron en Metro. El goteo de gente saliendo de la estación Estadio Metropolitano fue constante durante todo el día. Hicieron caso los rojiblancos a las recomendaciones de club, Ayuntamiento y Comunidad para que utilizaran el transporte público. Tenían razón. El atasco en la Avenida de Arcentales desde primera hora así lo aconsejaba. Hasta el presidente colchonero, Enrique Cerezo, acompañado por varios directivos, llegó al Metropolitano en el suburbano, predicando con el ejemplo.
El reloj ya marcaba las seis de la tarde, y la marea rojiblanca, dispersa por Las Rosas, Canillejas y San Blas comenzaba a acercarse al estadio, en cuyo exterior seguía la fiesta, las atracciones...
Y dieron las siete de la tarde. La hora prevista para la apertura de las puertas. El pitido inicial aún quedaba lejos, pero la gente se agolpaba para entrar pronto. Había que localizar el nuevo asiento y, sobre todo, ver el espectacular aspecto que presentaba el campo. Comenzar a sentir la nueva casa.
65.000 banderas rojiblancas aguardaban a los aficionados colchoneros con el mensaje “Bienvenido al Wanda Metropolitano, la casa de todos los atléticos. Atlético de Madrid-Málaga, 16 de septiem-
bre de 2017”. Salió el equipo a calentar y llegó la primera ovación de la noche.
Cuando los jugadores se retiraron, era el momento de los actos. Primero la Patrulla Águila dibujando en el cielo de Madrid, sobre el estadio, los colores del Atlético y los de España. Luego tres paracaidistas aterrizando en el césped con el balón y las banderas del club rojiblanco y la de España. Y más tarde, el saque de honor, realizado por José Eulogio Gárate, Fernando Torres y Hugo, un canterano. Pasado, presente y futuro del Atlético de Madrid.
Mientras, hacía aparición en el palco de autoridades el rey Felipe VI, que presidió la inauguración del estadio. Hincha colchonero, fue muy aplaudido por los seguidores rojiblancos y el monarca correspondió saludando. Junto a él, muchas autoridades, como la alcaldesa de la ciudad y la presidenta de la Comunidad de Madrid, mi- nistros...
Y empezó el fútbol. Con la gente algo más apagada que en el Calde- rón. Normal. La primera vez siem- pre resulta extraña. Para todo y para todos. Griezmann desatascó el partido con su gol. Suspiro de alivio. Primer tanto en el estadio. Y primera victoria.
Quedaba la traca final, con un espectáculo de luz y pirotecnia, para despedir un día histórico