Fallece a los 95 el ‘Toro Salvaje’ Jake LaMotta
Su azarosa vida fue llevada al cine por Scorsese
Una pertinaz neumonía acabó a los 95 años con la vida de Jake LaMotta, legendario campeón mundial del peso medio en los años 40 y 50 y el ‘Toro Salvaje’ al que Robert De Niro interpretó magistralmente en el celuloide.
LaMotta (83 victorias y 19 derrotas en 106 combates) se hizo famoso por su sobrehumana capacidad para encajar tremendos castigos. Fue memorable su serie de seis peleas con ‘Sugar’ Ray Robinson: Jake sólo le venció una vez y en su último cara a cara, en Chicago, recibió tal paliza que pasó a la historia como ‘La masacre de San Valentín’.
Su esgrima era limitada, su puño no tenía demasiada dinamita –sólo ganó por KO en 30 ocasiones– y su juego de piernas se asemejaba al de un autómata, pero cautivaba al público porque era tan duro como sucio. Sus evoluciones entre las doce cuerdas eran las de un matón de barra que no reparaba en estilismos para echar mano de todo el catálogo de perrerías deshonrosas pero eficaces que se aprenden en la calle.
Los callejones del Bronx fueron su escuela. Su padre organizaba peleas callejeras entre niños en las que Jake era la estrella. La calderilla que arrojaban los curiosos servía para pagar el alquiler. A los 19 años decidió pasar a profesional. Su heterodoxia barriobajera era un imán para la afición y pronto se ganó el derecho a medirse con los grandes. En 1949 se ciñó el cinturón del peso medio en Detroit batiendo al francés Marcel Cerdan por KO en el 10º. Tras pasar sin pena ni gloria por el peso semipesado, Jake se retiró en 1954 pero su popularidad permaneció intacta.
Propietario de varios bares, su verbo fácil y su magnetismo pronto le llevaron al cine, participando en 15 películas, entre ellas ‘El Buscavidas’, con Paul Newman