Impotencia y bronca de CR7
Ni Isco ni Ceballos se libran de la ira del luso, que sigue negado
No olvidará Cristiano Ronaldo el choque de Mendizorroza. No hay una razón muy especial, pero tras cinco partidos de penitencia y una dura derrota ante el Betis en el Bernabéu el luso llegaba a Vitoria con la obsesión del gol. Y no pudo tener peor fortuna ya que, aunque se prodigó sobre la portería de un inseguro Pacheco, se fue como llegó. Ese vacío se tradujo en gran desesperación, en bronca para sus compañeros cuando no le pasaban el balón o cuando lo hacían muy tarde y en dos palos que, a veces, son enemigos y, a veces, amigos, si no que se lo digan a Keylor Navas.
El futuro ‘The Best’ que apareció en el campo sobre la media hora, tuvo que conformarse con aplaudir -es un decir- a su compañero Dani Ceballos. El andaluz se puso el traje del portugués y anotó dos goles en solo tres disparos mientras Cristiano lo chutaba todo sin fortuna. La imagen de CR7 pegándole la bronca al chaval fue impresentable, aunque haya quien interprete que el crack blanco tiene una naturaleza de campeón indomable y que siempre quiere ganarlo todo. Como cualquiera, no faltaría más.
Esa tétrica estampa con Ceballos la repetiría en la segunda parte con Isco ya que el andaluz eligió el disparo antes de cederle un balón de oro dentro del área. ¡Pecado capital! La fortuna para los blancos es que no hay ningún ‘Cavani’ que le plante cara al reaparecido Cristiano, que volverá a disponer este martes de una nueva ocasión para aumentar su historia.
Mientras Ronaldo se quedaba sumergido en el cabreo y en el mosqueo, Zidane acababa el partido en la banda desmelenado, intentando animar a los suyos para que frenaran el ímpetu de un competitivo Alavés. Ver cómo el fran- cés sacaba al chaval Borja Mayo- ral para perder tiempo en el añadido habla por sí solo de un Madrid que ganó, pero que pudo perfectamente perder ante un equipo que solo suma un tanto (un golazo), precisamente a los blan- cos en seis partidos.
Por cierto, Modric y Bale se que- daron en el banquillo todo el parti- do y el Madrid ganó. ¿Casualidad? A todo esto, Messi sigue mirando a Cristiano por el retrovisor
Zidane dejó a Bale y Modric en el banquillo y les cita para la visita a Dortmund