Se mantiene el pulso en Manchester
Un gol de De Bruyne mantiene líder de la Premier a su equipo, empatado a puntos con el United, que ganó al Crystal Palace
Algo más de tres puntos se llevó ayer el Manchester City de Stamford Bridge, que se impuso al Chelsea (0-1) con un tanto de De Bruyne, el hombre que escenifica el paso adelante del cuadro celeste. Líder de la Premier tras el golpe de autoridad en Londres, el cuadro de Guardiola ganó la partida de ajedrez al de Conte. Dos estrategas forzados a retocar algunas piezas de inicio, aunque fueron los visitantes los que consiguieron domesticar el balón en un primer tiempo en el que la táctica se impuso a las ocasiones.
Con el balón, el City fue instalándose progresivamente en terreno del Chelsea, a quien le costó demasiado conectar con sus socios ofensivos, expuesto al aguante de Hazard y a los demarques de Morata, que tuvo que retirarse lesionado superada la media hora de juego. Algo arrinconado atrás, el equipo de la capital inglesa salvó los muebles en el primer acto, encomendado a la suerte y a Courtois, que rechazó un cabezazo de Fernandinho al filo del descanso.
Con De Bruyne acompañando al brasileño en la fase de salida, el City llevó las riendas de un partido que cambió de dinámica tras el intermedio. Bonita atmósfera la que se respiró en Stamford Bridge, cuya acústica elevó todavía más la tensión entre ambos conjuntos, conscientes de lo mucho que había en juego. Fue el City, sin embargo, quien apostó más decididamente por su objetivo y lo logró gracias a la inspiración de De Bruyne, que tras una pared con Gabriel Jesus conectó un latigazo imparable para el arquero del Chelsea (66’). Reaccionó Conte con las entradas de Pedro y Batshuayi, pero el City aguantó como un campeón y se llevó un triunfo que quizás escenifica, mejor que nunca, el traspaso de poderes.
El United, colíder
El cuadro de Mourinho hundió un poco más al Crystal Palace (4-0) para sumar los mismos puntos que el City y situarse como colíder, aunque por diferencia de goles ocupa la segunda plaza de la clasificación. Un gol tempranero de Mata (2’) desequilibró la balanza en un partido que el United dominó con holgura, a veces con pausa y otras imprimiendo velocidad. Fellaini, soldado fiel de Mourinho, anotó el segundo (35’) y el tercero (48’) en dos jugadas en las que demostró su potencia física y al final Lukaku no faltó a su cita con el gol al empujar una asistencia de Martial (89’). El United no se desengancha del City
Con su sello en el juego y en los goles, De Bruyne escenifica el paso adelante del City