Jonathan, un ejemplo que no ansía serlo
Rea no quiere que sus hijos aprendan que ganar siempre es algo normal y habitual
Jonathan Rea es conocido en pista por su increíble capacidad de ir rápido sea como sea. Así lo destacan sus mecánicos y jefes y son muchas las batallas que nos ha regalado a lo largo de las últimas temporadas, sobre todo con su compañero de equipo, Tom Sykes. Rea es calidad, clase, el ir por el sitio, pero también es agresividad y una competitividad descomunal. Pero cuando se baja de la moto y se quita el casco, sorprende a muchos por su cambio repentino. En pista parece otro. Fuera de ella es un hombre familiar, trabajador e introvertido. Lejos de los focos de MotoGP, a los que nunca ha querido exponerse si no era con una moto ganadora, el ya tres veces campeón del mundo de Superbikes puede combinar de la mejor manera sus dos grandes pasiones: las motos y su familia.
Su inseparable esposa Tatia y sus dos hijos pequeños, Jake y Tyler, le acompañan a cada circuito. “Nuestra vida es un poco complicada. Llevamos a nuestros niños a las carreras, incluso cuando están enfermos .Venimos y gana dos mangas y es como que todo cobra sentido. Obviamente, está bendecido. Las cosas buenas le pasan a la gente buena”, explica su esposa en las redes sociales, orgullosa del carácter “humilde y talentoso” de su marido. No obstante, Rea no pretende ser un ejemplo para sus hijos. “Ahora mismo estoy en el nivel en el que ganar se está convirtiendo en algo normal y no quiero enseñarle eso a mis hijos, ya que no es una buena lección de vida para aprender”, apuntó Rea a escasas horas de ganar su tercera corona, dejando claro que “están conmigo en este viaje y estar juntos nos hace más fuertes”. La familia es una de las claves de su éxito, y no es de extrañar que se enamorara a primera vista del Provec Racing, la estructura catalana, con sede en Granollers, que gestiona el Kawasaki Racing Team, que si por algo se caracteriza es por formar una gran familia ganadora, liderada por los hermanos Guim y Biel Roda y por Pere Riba, que junto a Rea siguen compartiendo un sueño del que no quieren despertar
La esposa de Rea, Tatia, y sus dos hijos, Jake y Tyler, le acompañan siempre