Mundo Deportivo (Gipuzkoa)

Aerolíneas Diego Llorente

El central madrileño volvió a marcar con otro cabezazo incontesta­ble para poner el 4-4

- Gorka Benito Donostia

Cuando el 26 de junio la Real hizo oficial el fichaje de Diego Llorente hasta 2022, el club txuri urdin se hacía con un central joven, que pertenecía al Real Madrid pero que había jugado las dos últimas temporadas cedido en el Rayo Vallecano y en el Málaga.

Al ser un defensa central, su cometido principal es el de intentar que el equipo encaje el menor número de goles posible pero en sus primeros partidos como jugador realista está destacando por otra faceta.

Lo cierto es que Llorente es, a día de hoy, el máximo goleador del conjunto de Eusebio Sacristán si se tienen en cuenta la competició­n doméstica y la Europa League.

Ayer volvió a entrar como un avión a la salida de un córner en el minuto 85 para poner el que a la postre sería el definitivo 4-4 en el marcador. Con ese gol, el madrileño acumula ya cinco tantos con la elástica txuri urdin, dos en Liga y tres en la Europa League.

Es el único jugador que suma esa cifra de goles a estas alturas, en lo que a la plantilla de Eusebio respecta, aunque es cierto que en Liga Juanmi, Willian José y Oyarzabal llevan más goles que Llorente. Los tres atacantes suman tres dianas cada uno.

El partido no comenzó del todo bien para el central, ya que a los cinco minutos Sanabria adelantó al Betis en una jugada en la que le cogieron la espalda mientras estaba pidiendo fuera de juego insistente­mente. A medida que transcurrí­an los minutos, Llorente, que estrenaba pareja en la zaga junto a Raúl Navas, fue asentándos­e y cogiendo las riendas de la defensa en lo que a la salida de balón se refiere.

Ya ha demostrado, en este tramo inicial de Liga, que no le pesa el hecho de tener que sacar la pelota jugada. Además, tiene un gran desplazami­ento largo, lo que le viene muy bien a la Real en partidos en los que los rivales se encierran en su campo.

En el choque de ayer no realizó muchos cambios de orientació­n pero sí hubo varias jugadas de mérito en las que encontró a Xabi Prieto u Oyarzabal entre líneas.

Por poner un pero a Llorente, es que se le ve un poco blando en las

La pregunta puñetera Cuántos goles le hacen falta a la Real para poder ganar un partido con tranquilid­ad?

disputas, lo que permite a los delanteros rivales tener ocasiones más propicias para el remate.

De todas formas, no se arruga ante nadie y se anticipa muy bien a los delanteros cuando tiene la mínima oportunida­d.

Se jugó la expulsión

En la segunda parte se repitió la tónica del primer tiempo. En la primera jugada poco pudo hacer para evitar el 2-3 de Joaquín y el 3-4 de Sergio León también le pilló volviendo de una falta a favor.

Minutos después de que el madrileño consiguier­a el tanto del empate, Tello filtró un balón para Sergio León y Llorente le paró con un agarrón al borde del área que bien podía haber sido tarjeta roja pero terminó en amarilla.

Como a todo el equipo, le falta mejorar en algunos aspectos defensivos pero lo que está claro es que la Real tiene un avión para el balón parado ofensivo

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FOTO: EFE Diego Llorente celebra el tanto que supuso el empate a cuatro, su quinta diana entre Liga y Europa League en lo que va de temporada

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