“ME SIENTO MEJOR JUGADOR”
Aritz Elustondo (Beasain, 1994) jugó ante el Valencia -su último partido como titular- su partido 50 en Primera con la Real para un total de 57. No es un mal balance cuando están a punto de cumplirse tres años desde su debut, teniendo en cuenta sobre todo que la pasada temporada apenas jugó. En el inicio de la actual ha recuperado protagonismo en los planes de Eusebio y el defensa lo achaca a su cambio de mentalidad. “En verano vine a comerme el mundo”. Aunque sabe que vendrán tiempos peores, el guipuzcoano está satisfecho por cómo van las cosas. ¿Cómo valora el protagonismo que está teniendo en este inicio de temporada? Estoy muy contento, estoy teniendo minutos y protagonismo. Por mucho que ahora estemos en una racha negativa, estoy satisfecho con mi trabajo. ¿En verano esperaba que pudiera empezar la temporada con tantos minutos? Sí. Llevo diciéndolo cada vez que me lo preguntan. En verano vine con otra mentalidad, con la cabeza tranquila. Sabía que, con confianza y con ritmo, podía demostrar lo que era yo. Hice una buena pretemporada, me dieron la opción de ser titular en el primer partido y luego, con los partidos, he ido cogiendo más confianza. Quizás pueda parecer que no tiene importancia pero, ¿desconectar en verano le ha podido servir para rendir ahora? Sí, todo sirve. Estuve de vacaciones con los amigos y con la novia, desconecté y vine a entrenar con ganas de comerme el mundo. Pensé que, con el trabajo y con el sacrificio, me iba a llegar el momento. Es verdad que me ha llegado desde el inicio pero sé que vendrán momentos peores y entonces estaré tranquilo, con la misma confianza, para cuando me toque jugar demostrar en el campo. Su misión primordial es defender pero incluso está aportando en ataque. Ha marcado un gol y le dio una asistencia a Juanmi ante el Villarreal… Creo que necesitaba algo así. El gol contra el Valencia, aunque no logramos la victoria, también me dejó contento porque necesitaba sacar ese orgullo, esas ganas, ese hambre que tenía. No están siendo buenos partidos, sin embargo, para los centrales. ¿Se sienten desprotegidos? Con el tipo de juego que tenemos, sabemos que podemos quedarnos desprotegidos pero nuestro juego es así. Atacamos todos y defendemos todos pero es verdad que en los últimos partidos, con pocos pases, se han plantado delante del portero y nos han hecho mucho daño. ¿Hay que corregirlo?
Sí. Ya veníamos corrigiéndolo desde antes pero ahora más si cabe. Este parón nos ha venido bien para ajustar esos detalles que nos hagan ser más fuertes atrás. No nos damos por vencidos. Nuestro juego tiene que ser el mismo pero en lo defensivo tenemos que poner una marcha más. ¿Se refiere a algún matiz táctico? Estas dos semanas estamos trabajando cuestiones tácticas más puntuales y el aspecto defensivo. Van unos cuantos partidos en los que con dos o tres pases nos están haciendo mucho daño y esto lo queremos acabar desde ya. ¿La recuperación de Iñigo, cuando llegue, puede ser una buena noticia en el intento de defender mejor? Un jugador como Iñigo nos va a venir muy bien. Todos queremos estar en el ‘once’, tanto Iñigo como Diego, Raúl o yo lo podemos hacer bien. ¿Cómo le afecta la competencia de Iñigo?
Pienso que es bueno, hace que no te despistes en ningún entrenamiento. Querer estar cada fin de semana en el ‘once’ hace que entrenes con más ganas. En diciembre se cumplirán tres años desde que debutó con el primer equipo. ¿Siente que el tiempo pasa rápido? Sí. Han ocurrido muchas cosas, he aprendido muchísimo tanto con los compañeros como en el campo. Día a día soy mejor jugador. La pasada temporada me vino muy bien para madurar, cambiar muchas cosas y ser mejor jugador. No jugar mucho, por tanto, ayuda a la larga pero cuando no se está jugando, ¿cómo se vive? El año pasado fue muy duro para mí en lo personal y en lo futbolístico. Por mucho que no tuviese muchos minutos me hizo crecer y madurar. Me siento mejor jugador, en los entrenamientos fui aplicando lo que me pedía el entrenador y creo que este año se está viendo. ¿Cómo vive la semana un jugador que no tiene minutos los domingos? ¿Habla mucho el
entrenador con él? Simplemente sabes que no estás jugando y sólo puedes dejarte la piel en los entrenamientos para que el entrenador te haga caso. El año pasado no tuve continuidad y cuando me tocaba jugar no tenía la confianza que tengo ahora. Fue duro para mí y para mi familia pero ahora estoy con confianza y quiero seguir así. ¿Se le pasó por la cabeza cambiar de equipo?
Para nada. Desde el club me transmitieron que seguían contando conmigo y este verano vine con la mentalidad de comerme el mundo, de demostrar que podía jugar en la Real. ¿Es mejor jugador que antes?
Creo que sí. El año pasado intenté mejorar a través de los entrenamientos. ¿Qué ha cambiado en su juego?
Muchas cosas. Llegué al primer equipo jugando de lateral y luego pasé a hacerlo de central. El primer año con Eusebio, cuando lo jugué todo, aún no teníamos el juego que tuvimos la pasada temporada en la que me costó adaptarme a la salida de balón, a las cuestiones tácticas que pedía el entrenador. Esta temporada me siento más cómodo. ¿Usted se ve más como lateral o como central?
Yo lo que quiero es estar en el ‘once’. La temporada que lo jugué casi todo lo hice como lateral. Esta temporada he
empezado de central y yo con estar en la alineación me conformo. Para Eusebio parece más central que lateral…
Ahora mismo creo que sí. Entreno como central, creo que me ve más como central. En el lateral, además, hay mucha gente. ¿Se ha fijado en algún jugador como modelo desde que empezó?
Cuando veo un partido intento fijarme. Antes en los laterales y ahora en los centrales. Siempre he tenido como ídolo a Xabi Alonso, aunque no juegue en mi posición. ¿Le gustaría parecerse a algún central?
Nunca he pensado en parecerme a
alguien, quiero ser yo mismo, intentar mejorar para jugar cada domingo. ¿Viene a Zubieta, hace su trabajo y cuando se va desconecta fácil del fútbol o es de los que está las 24 horas pensando en ello? Sí suelo ser de darle vueltas a la cabeza. Sé que no es bueno, aunque no es que me cueste desconectar del fútbol. Veo fútbol y me encanta porque es nuestro trabajo, pero no me cuesta demasiado desconectar. ¿Sigue viviendo en Beasain?
Este año me planteé ir a Donostia a vivir pero con la muerte del aita (en diciembre de 2016) no he querido dejar sola a la ama en casa. Mejor que en casa, además, no se está en ningún lado