‘JOYARZABAL’ MARCA EL CAMINO
El de Eibar, guía de la Real para retomar el camino de la victoria y el buen juego Dobla su registro goleador del pasado curso y, con cuatro tantos, es el máximo realizador realista Agirretxe es el único canterano que presume de números similares: 5 en 8
La Real necesitaba un guía que pudiese manejar sus destinos en las pasadas semanas de zozobra defensiva y lo ha encontrado en Mikel Oyarzabal. El canterano de Eibar resolvió un encuentro trabado como el del sábado con un golazo para elegidos a 13 minutos para el final y se está destapando como el realista más determinante de la temporada, en su figura de los últimos tiempos. Parece haber dejado atrás la mochila de la siempre complicada segunda temporada.
Oyarzabal está al nivel con el que deslumbró en el final de la temporada 2015/16, en la que Eusebio comenzó a darle continuidad alineándole cada domingo. Su trabajo durante el pasado curso fue digno de elogio, pero se quedó en dos goles, cifra demasiado exigua para un delantero.
En el presente curso, ya es el máximo realizador en Liga con cuatro ‘txitxarros’, uno más que Juanmi y Willian José, que comenzaron el campeonato como un cohete. Por lo tanto, el de Eibar ya dobla en sólo ocho jornadas su registro del pasado curso -dos dianas- y está a dos del que estableció en la campaña de su debut, la 2015/16, en la que rubricó seis goles.
La eficacia de Mikel Oyarzabal va más allá, por cuanto sólo ha podido participar en cinco de los ocho partidos de Liga disputados hasta la fecha. Tras tomar parte en los dos primeros encuentros, saldados con triunfos, ante el Celta (2-3, marcó el primero) y el Villarreal (3-0), volvió lesionado de una concentración de la selección española Sub-21 y se perdió los tres siguientes choques de Liga, ante el Deportivo, el Real Madrid y el Levante, y los dos primeros de la Europa League, ante el Rosenborg y el Zenit de San Petersburgo. Su regreso, no obstante, fue fulgurante. Ha marcado un gol en cada uno de los tres últimos partidos de Liga, contra el Valencia, el Betis y el
Alavés y ha sido el futbolista más notable del ataque realista. Dio asimismo una asistencia en la contienda ante el Valencia y en la selección Sub-21, marcó y sirvió otro tanto an- te Eslovaquia.
Eusebio debe explotar su estado de forma contra el Vardar en Macedonia el jueves, donde jugarán Oyarzabal y 10 más. Será el debut europeo del canterano en la Real por cuanto se perdió los dos primeros partidos de la fase de grupos y en las dos campañas anteriores en las que militó en el primer equipo, la Real no participó en competición europea. Su bautismo continental le llega en el mejor momento.
Un gol cada 112 minutos
El pasado curso fue complicado para Mikel Oyarzabal. Fue el máximo asistente del equipo, con siete últimos pases, y trabajó a destajo en cada partido -disputó los 38- para ser un efectivo útil, pero estuvo poco atinado de cara a puerta (dos goles). Su gol en la última jornada, ante el Celta, tuvo un peso simbólico. En el día en que la Real certificó su sexto puesto, quiso hacer ver que ya se ha- bía quitado la pesada mochila de la segunda temporada, que suele ser la más complicada para un ‘pipiolo’.
En el presente, ya liberado, está volviendo a hacer aflorar esa cali- dad que ya apuntó en su primera campaña. El fiel reflejo fue el tanto, precioso, pleno de talento y astucia, ante el Alavés. Disparó sobre una baldosa colocando el balón con una parábola y una intención que resul- tó imparable para el portero.
Fue su cuarto gol en 448 minutos disputados en la Liga, lo que arroja una media muy buena de un tanto cada 112 minutos.
Además, el único canterano que ha podido firmar un inicio realiza- dor tan positivo desde el ascenso de 2010 fue Imanol Agirretxe en la cam- paña 2015/16. En las ocho primeras jornadas, sumaba cinco goles, uno más que Oyarzabal ahora. En la jor- nada 10 ya llevaba ocho y en la 15, 12. Hasta que Keylor Navas segó el me- jor momento de su carrera.
No le importaría a Mikel emular esos números, pero regateando las lesiones, claro