Tras el riesgo toca jugar con seguridad
Marc Márquez ha peleado este título de MotoGP como nunca, se la ha jugado buscando los límites como demuestran las 24 caídas concedidas hasta la fecha pero finalmente se ha ganado cierta calma de cara a las dos últimas carreras de Sepang y Cheste donde ya actuará con un match-ball de colchón si es que no lo transforma ya en título este domingo en el circuito malayo.
Decantar esa cuarta corona MotoGP y sexta de su carrera deportiva antes de cumplir los 25 años es el objetivo principal del de Cervera pero ahora que juega con ventaja anuncia que “es hora de administrar, he arriesgado mucho durante la temporada y ahora toca disfrutar de esta victoria y planear muy bien las dos carreras que quedan, sin tener esa ansia de intentar ser campeón que te puede jugar malas pasadas”.
Tras el riesgo tomado hasta Australia, tras responder en Phillip Island con la misma agresividad que han practicado contra él en carrera toca respirar y administrar.
Marc nunca ha sido un piloto que actuara a lo loco cuando ha tenido el match-ball en el bolsillo y si debe conformarse se conforma. Juega con seguridad y mucha cabeza porque aunque su lenguaje corporal en carrera indique lo contrario Marc Márquez lo tiene todo perfectamente analizado y calculado, hasta el riesgo
Se ha ganado cierta calma para las dos últimas carreras, a respirar y administrar