Doncic se multiplica ante un Armani muy exigente
El esloveno llega a un 41 de valoración para liderar el tercer triunfo de los blancos
Desde el principio de temporada sin Llull y ahora con las bajas de Kuzmic, Randolph y Thompkins, el Madrid se ha puesto en manos de su jugador más joven pero también más talentoso, Luka Doncic, para salir airoso de este arranque de Euroliga.
Parece difícil porque el listón está muy alto pero el esloveno no deja de sorprender cada día que pasa. Ante el Armani Milán dio un salto de calidad en sus exhibiciones para acabar con un 41 de valoración, igualando la mejor de un jugador blanco en esta competición. Su recital fue determinante para que el Madrid superara al rival en un festival de juego ofensi- vo (101-90) que le permite mantenerse invicto en la competición con balance de 3-0
La presencia de Doncic en pista coincidió con los minutos de mayor seguridad y eficiencia de su equipo y buena parte de las acciones, ofensivas y defensivas, le tuvieron como protagonista. Sus cifras finales fueron de escándalo: 27 puntos, 8 rebotes, 5 asistencias y 10 faltas recibidas.
Campazzo (15) y Ayón (14) se convirtieron en los escuderos del esloveno en un Madrid con apariciones puntuales y también destacadas de Rudy en múltiples facetas, o Causeur en anotación.
Forjado en los esquemas impla- cables de Pianigiani, el nuevo Armani Milano dista mucho de ser el equipo indolente y frágil de campañas anteriores. Con Goudelock y Theodore como manejadores del ritmo y de los ataques, es un equipo con buenos secundarios y recursos variados que hacen pensar en sus opciones serias para alcanzar playoff.
Tras un primer cuarto en el que cedió el dominio pero aguantó la pegada para no quedar KO (30-28), los lombardos llegaron a dominar en fases del segundo período gracias a su descomunal acierto en el triple (8 de los primeros 10 triples lanzados).
Las alarmas se encendieron en el banquillo blanco al inicio de la segunda mitad con 54-60 en el marcador. La concienciación del equipo transformó su defensa y esa fue la base de una reacción letal plasmada en un parcial de 20-0. La eficacia en triples, contragolpes y acciones espectaculares, muchas con Doncic como estrella, provocaron el éxtasis en el WinZink Center, seguro de que el equipo había decidido el partido.
El Milán se empeñó en volver al mismo y por momentos parecía conseguirlo con Theodore, Goudelock y Gudaitis como referentes. Triples oportunos de Causeur y Campazzo o acciones, nuevamente, de Doncic derribaron el último sueño de los milaneses y pusieron la guinda a un partido excitante