Un presidente sin oposición
Jokin Aperribay cierra la puerta a posibles rivales para su sillón, inexistentes estos nueve años
Jokin Aperribay sólo se ha encontrado con una verdadera oposición a su gestión en la Real en su primer día los 3.239 de su mandato. Por eso resulta más sorprendente que anteayer convocara unas elecciones a la presidencia el próximo 13 de diciembre de una ma- nera tan sorprendente y un tanto bananera, sin dar opción a otro posible aspirante a promover una candidatura y convencer al accionista. Lo normal es que no le hiciera falta esa maniobra tan dudosa porque nadie discute su gestión, no lo ha hecho en estos nueve años.
De hecho, algunos de los que le insultaron en aquella tensísima Junta del 20 de diciembre de 2008 en el velódromo, en la que removieron a Iñaki Badiola, se hacían fotos con él unos meses después antes de un partido en Salamanca. Sólo hay que ver la fotografía de la situación de la Real en aquel momento -arruinada, en Segunda, fracturada socialmente- y la de ahora para colegir que la gestión ha rozado lo impecable.
Desde aquellos gritos de ese día y una pequeña manifestación a la puerta del estadio del siguiente, el único que ha querido remover el sillón presidencial ha sido precisamente Badiola. Pero sus ataques foribundos a través de medios propios y algún aliado se quedaron en nada, en los rescoldos de resquemor de quien salió por la puerta de atrás, aunque en loor de multitudes. Aquellas acusaciones de dopaje en 2013 cuando la Real se jugaba la cuarta plaza evidenciaban poco amor al club.
La Real es ahora mismo un cara- melo para un emprendedor amante de lo txuri urdin que quisiera presentarse a presidente: en Europa, con una previsión de ingresos de 100 millones de euros, una plantilla formada por jóvenes y talentosos jugadores de casa con ambición y la remodelación del estadio en marcha tras superar innumerables trabas. Pero hay varios factores que hacen poco viable que a Aperribay le salga competencia: a su buena gestión y al control sobre
El debarra sólo halló contestación el primer día de los 3.239 de su mandato en la Real
La buena gestión, el control del capital y la falta de tiempo hacen inviable la competencia
el capital social que sigue decidiendo votaciones se le une ahora la falta de tiempo para arbitrar un proyecto sólido, alternativo al de Aperribay. Desde que la semana que viene hagan el anuncio oficial de la Junta y de las elecciones, habrá sólo un mes para desarrollar una hipotética campaña.
El Kursaal el 13 de diciembre huele de nuevo a paseo militar y a 97% de apoyos a Jokin Aperribay, el presidente sin oposición