El Sanse ve frenada su racha
El Gernika se impuso en Zubieta por la mínima en un partido con escasas oportunidades de gol
El Sanse no pudo darle continuidad a la buena racha que acumulaba en las últimas semanas. El filial txuri urdin, que llevaba tres partidos consecutivos puntuando y dejando su portería a cero, vio frenada su estadística ante el Gernika, que aprovechó la única ocasión clara que tuvo en los noventa minutos para marcar y asegurarse el triunfo en Zubieta.
Fue un enfrentamiento sin demasiados fuegos artificiales y en el que escasearon las ocasiones de gol en ambas porterías. El Sanse arrancó mejor ante un Gernika que se quedó a la espera de comprobar los argumentos de los txuri urdin. Ese control e iniciativa que llevaron los pupilos de Imanol Alguacil no se materializó en aproximaciones al área vizcaína a pesar de que Merquelanz y Muguruza trataron de buscar la línea de fondo para surtir de balones a Jauregui, el ‘9’ realista en el día de ayer.
El peso del partido pasó de los locales a los visitantes. La primera ofensiva del Gernika llegó en forma de un contraataque que pudo organizar el equipo vizcaíno tras un fallido saque de esquina del Sanse. Fue el comienzo de sus minutos de dominio, una fase a la que sacaron el mayor rédito posible. Una buena jugada de Entzi llegó a las botas de Madrazo, que pudo batir a Zubiaurre para subir al marcador el que acabaría siendo el único gol de la tarde. Corría el minuto 27.
El último cuarto de hora del primer tiempo fue un vendaval txuri urdin. El Sanse, lejos de tejer su juego con calma y cierto criterio, abusó de balones largos a la olla, una estrategia atípica que curiosamente estuvo a punto de tener éxito si Muguruza hubiera cazado el esférico al filo del descanso.
El guión no cambió en el segundo acto, con un Gernika agazapado y defendiendo su ventaja y un Sanse volcado en ataque. Ambos equipos se quedaron pronto con un jugador menos, y en un planteamiento de diez contra diez fue Merquelanz el que lo intentó con un disparo a las manos de Diego.
El tramo final del partido fue el menos vistoso. Celorrio, que salió en la segunda parte, tuvo la mejor del partido con un cabezazo que se marchó arriba.
A pesar de que el Gernika se quedó con nueve en los últimos minutos, los txuri urdin no supieron atravesar la férrea muralla vizcaína. Derrota y adiós a la racha