Aprueban el primer año del proyecto
El presidente Chen Yansheng calificó su mandato con un “6”. No está demasiado satisfecho de cómo le han salido las cosas al Espanyol en 2017, sobre todo a nivel deportivo. El objetivo europeo se quedó corto. El equipo de Quique Sánchez Flores acabó en octava posición y estuvo hasta la jornada 30 luchando por la séptima posición que les permitiría disputar la Europa League. El equipo estaba enchufado y la afición veía que se podía alcanzar el sueño. Pero la gran desilusión llegó en el jornada 30. Perdieron ante el Athletic, rival directo, tras una revolución en el once de Quique. Aquello fue un duro mazazo para el vestuario y para los seguidores blanquiazules. Era el segundo jarro de agua fría de la temporada. El primero fue la eliminación de la Copa del Rey en 1/16 a manos del Alcorcón. Al acabar la campaña, todos se comprometieron en superar el objetivo en la siguiente.
Comenzaron la pretemporada con las ilusiones renovadas y con altas expectativas. No había miedo de pronunciar la palabra ‘Europa’ y nadie dudada de que se lucharía por ella desde el inicio. Pero el mercado de verano no fue el esperado. El Espanyol se hizo con la propiedad del portero Diego López y de los delanteros Pablo Piatti y Leo Baptistao. Sin embargo, no volvió a ligar a Diego Reyes, una de las prioridades de Quique. El central mexicano se quedó en el Porto. Firmaron a Esteban Granero, Mario Hermoso, Sergio García y Naldo, y repescaron a los excanteranos Pau, Sergi Darder, Dídac Vilà y Sergio Sánchez. Quiques no ocultó su decepción durante la pretemporada y al final del mercado de verano.
El inicio liguero no pudo ser más irregular ni menos decepcionante. Las expectativas europeas se diluyeron pronto y el Espanyol empezó a situarse en la zona media con la vista puesta en el descenso. La afición perica, muy des- ilusionada por el papel del equipo, ‘explotó’ en Cornellà-El Prat al ver que los suyos perdían 1-0 contra el Girona. Por primera vez, la grada gritó contra Quique, los jugadores y el Consejo. La idea de la posible destitución del técnico empezó a planear sobre el Espanyol pero el presidente Chen lo ratificó en el cargo. Quedaban dos encuentros para acabar 2017. Empataron en Las Palmas y se colocaron muy cerca del pozo. Ganar al Atlético era vital para estar solo a dos puntos del descenso. Y lo logaron. Un gol de Sergio García hizo ‘explotar’ Cornellà-El Prat en aplausos. Dieron un giro de 180º a la situación. La victoria les dejó a cinco puntos de la zona roja. Todos esperan que ese triunfo sea un punto de inflexión en la tabla
El triunfo ante el Atlético, en el último partido de 2017, debe ser un punto de inflexión