PASAN POR ENCIMA
El GBC logra en Burgos una contundente victoria tras dominar en todas las facetas Van Lacke, Henk Norel y Agbelese lideran al equipo y marcan territorio ante un rival directo
Gipuzkoa Basket logró ayer en Burgos un triunfo extraordinario, contundente (76-99), claro y muy merecido tras dominar a su adversario en todas las facetas del juego. Fue mejor en defensa, claramente, también en porcentajes de acierto, en rebotes y en marcar el tiempo del partido que más le convenía. El triunfo, además, es vital de cara al basket average, ya que ambos equipos, a priori, comparten el objetivo de la permanencia.
Los de Fisac solo fueron por detrás en el marcador en los primeros minutos. El Burgos, con Jenkins y Fischer acertados en esas acciones iniciales, consiguieron un 12-6. Les duró poco, lo que el GBC tardó en empezar a buscar a Henk Norel en el interior. El holandés le dio un curso acelerado a Huskic de cómo jugar bajo los aros, tanto que el croata ex del GBC acabó desquiciado y perdiendo los nervios. Con Norel alimentado y Chery acertado, al equipo visitante se le sumó en el segundo
cuarto un excelente Agbelese. El pívot llegó a los 16 puntos, con cuatro mates, y ocho rebotes en su estadística final. Pero también se vio parte de la mejor versión de Swing, importante con dos triples en el segundo cuarto para empezar a marcar la diferencia, y por supuesto Van Lacke. El argentino estuvo soberbio en defensa y en ataque.
Listo para robar balones y también para finalizar jugadas en la canasta contraria. Así las cosas, mediado el segundo cuarto, el GBC empezó a marcar la diferencia con un parcial de 4-13 que le ponía por delante en el marcador (28-35) de forma clara. Después y a pesar del tiempo muerto del entrenador local, los guipuzcoanos todavía le
asestarían otro golpe a un Burgos que empezaba a mostrar síntomas claros de que no podía con la situación. En un abrir y cerrar de ojos, el segundo triple de Swing y otro más de Van Lacke, más dos tiros libres del argentino, ponían la ventaja en un esperanzador 32-47 para el GBC.
En el tercer cuarto nada cambió. El Gipuzkoa Basket puso la directa, jugó rápido, desarboló a su rival, le ganó muchos rebotes ofensivos, economizó pérdidas y tuvo contra las cuerdas al conjunto local, que no encontraba a nadie para salir al rescate. Ni Fischer, ni Jenkins, principal soporte anotador en la primera parte, ni ninguno de sus pívots, con Huskic desequilibrado y Thompson muy bien defendido. Para cuando se quiso dar cuenta, el GBC, con un juego muy coral y en el que todos aportaban se fue hasta el 56-80 del minuto 30. Hasta Norel se permitió la licencia de anotar un triple, también lograron bombas Chery y Fakuade en este periodo. El Burgos dejó claro el por qué es la peor defensa del campeonato, y el GBC jugó a placer, a su ritmo trepidante y a su versatilidad ofensiva, en la que todos fueron protagonistas.
Un rival hundido
Sobraron los últimos diez minutos. Un Burgos hundido y sin respuesta alguna y un GBC que se sabía triunfador intercambiaron canastas. Hasta 29 puntos de ventaja llegaron a tener los de Porfi Fisac en el arranque de este periodo. Ambos equipos conocían el desenlace y solo era cuestión de comprobar por cuantos puntos el equipo donostiarra se llevaba la victoria. Algún triple local a la desesperada y poco más porque en el GBC no se bajó el ritmo ni un instante. Ni con el marcador muy a favor se relajó el conjunto visitante. Juega así y lo hizo hasta el final.
Había cierta preocupación a este partido por cómo llegaba el Burgos al mismo, habiendo ganado en Badalona la pasada jornada y con un ritmo de competición más que interesante. Además, la victoria del Betis en Sevilla remontando su partido ante el Zaragoza apretaba la parte baja de la clasificación. Por esto y por la forma de ganar, así como el average, la victoria ayer del GBC es de esas que valen doble y que marcan el territorio a favor de los de Fisac con respecto al peligro. Sobresaliente