Una temporada cruzada

Hay mucho de responsabilidad propia en los males que afectan a la Real esta temporada. Se ha fallado en muchas cosas desde el propio pilotaje del proyecto para que el conjunto txuri urdin sólo haya ganado dos de los 11 últimos partidos, le haya eliminado de la Copa un Segunda B y sólo tenga seis equipos por debajo en la clasificación. Sin querer olvidar la dejación de funciones que los máximos responsables deportivos del club han cometido, es justo admitir que la temporada viene torcida, de por sí. Sin tiempo para recuperarse de la marcha de Martínez al Athletic, a la que el equipo respondió con entereza y orgullo ante el Deportivo, la estrella del equipo, Willian José, se lesiona en vísperas de la visita al Bernabéu. Aunque no hay motivos objetivos, datos en la mano, para creer en la hazaña, la afición siempre sueña con un pelota- zo en estos feudos y más si el Madrid tiene la cabe- za tan en el PSG que es como si el partido de hoy no se jugara. En plena efervescencia de ilusión, llegó ayer el bajonazo del K.O. de Willian, no tanto por lo que afecta a un partido muy difícil como el de hoy, como por cómo influye en las expectativas a medio plazo, sobre todo las europeas, para las que no se va a poder contar con WJ. Levantarse de la lona tras este golpe no va a ser tan fácil como ante el Depor