Neymar, para ganar en Madrid llama a Messi
Jugadas de cara a la galería del brasileño y gesto cariñoso del bi-goleador Cristiano Ronaldo
No es lo mismo Neymar, venir al Bernabéu con Lionel Messi en tu equipo o hacerlo de líder total. Está bien, Neymar consiguió embaucar al madridismo cuando conducía el balón porque es un futbolista distinto. No está al nivel de Messi, ni siquiera de Ronaldinho, pero Neymar dejó jugadas para la galería en el Santiago Bernabéu y se ganó el gesto de complicidad de Cristiano Ronaldo, que acarició con cariño la cabeza del brasileño nada más acabar la primera parte dándole la bienvenida para cuando firme por el Real Madrid. Caracoleó Neymar pero el que marcó dos goles fue Cristiano Ronaldo y eso que gana 16 millones de euros más al año y él sí ha ganado algún Balón de Oro, tantos como Messi.
Neymar no se esconde, crea peligro, se atreve a dibujar jugadas en las que deja atrás a tres rivales... pero sin decidir, busca a Mbappé que es la elegancia sublime y gusta. No es Messi, ni siquiera Ronaldinho.
Horas antes del partido, Neymar colgaba en Instagram un mensaje de amor para Bruna Marquezine por el día de San Valentín y poco después un mensaje pidiéndole a Dios protección - Que Deus abençoe e nos proteja- con una fotografía con la camiseta del ‘10’ y las botas naranjas fosforitas que tanto se vieron después en el césped y que fueron protagonistas hasta el minuto 27. Porque de nuevo Neymar se cambió las botas, como nos tenía acostumbrados en el Barça. Esta vez tardó bastante más que los diez minutos que aguantaba para desesperación de Luis Enrique, que quería pensar que cada vez que se cambiaba Neymar de botas era porque le hacían daño y no por una mera cuestión publicitaria. El pacto Pelé en 1970, cuando se cambiaba sus botas para darle protagonismo a Puma, parecía el camino que seguía Neymar y en el Bernabéu nadie puede asegurar si las botas naranjas le molestaban pero si es cierto que se las cambió después de resbalar en el área pequeña madridista en una jugada espectacular.
Pitos a Neymar al inicio del partido, menos que a Dani Alves que cae peor. Más pitos cuando entra a Nacho y se gana una cartulina amarilla. Y después el silencio, cuando lleva por el camino de la amargura al lateral blanco.
Jugó con ganas Neymar. Es más fácil hacerlo con Messi en tu equipo porque sabes que en cualquier momento pone al estadio en pie, porque a Messi le aplaude hasta el rival. No es tan grande Neymar pero tiene ese toque especial, conduce el balón con la sensación de que nadie será capaz de robárselo. Es el líder absoluto y sólo el portero Alphonse Areola, totalmente de naranja, le roba momentos de protagonismo. Pero siendo el líder pierde el PSG 3-1. Esa es la realidad. Mbappé sigue desplazándose como un bailarín, es tan parecido a Titi Henry que resulta maravilloso pensar dónde llegará el francés, es otro super fenómeno.
No es Messi, ni Ronaldinho. Neymar está lejos de ese nivel. Ni tiene el ángel de Marco Asensio que revoluciona el partido para darle una alegría al Santiago Bernabéu con su desparpajo y su clase.
Neymar sabe de remontadas, seguramente creerá en el milagro... Pero Neymar, para ganar en el Santiago Bernabéu llama a Messi, igual te enseña algún truco. Se vive mejor con Leo en tu equipo, más si visitas Madrid
Ney se cambió las botas como en los viejos tiempos y el público le silbó