Las lecciones magistrales de Entrerríos con 37 años
El Barça alcanzó ayer 180 partidos invicto en competición española con el central en plena forma
Con su goleada en Puente Genil (19-38), el FC Barcelona Lassa alcanzó ayer 180 partidos sin perder en competición española, 139 de la Liga ASOBAL, todos saldados con victoria salvo el empate de la 13ª jornada en Guadalajara (26-26), cuando se acabó la espectacular racha de 133 triunfos consecutivos. El equipo de Xavi Pascual no pierde desde mayo de 2013, contra el Naturhouse La Rioja (33-31).
En esta serie triunfal Raúl Entrerríos imparte día sí día también lecciones magistrales, también en la Champions. El central cumplió el lunes 37 años, pero sigue en plena forma, fresco como un joven a pesar de la carga que lleva encima tanto en el Barça como en la selección española, donde se acaba de coronar campeón de Europa tras otro torneo para enmarcar: marcó 27 goles, dio 15 asistencias –muchos en momentos delicados– y aportó todo lo intangible que distingue a un líder.
“Físicamente, Raúl es un portento”, avisa el médico del Barça, Josep Antoni Gutiérrez. “Estamos en un equipo que te permite descansar con cabeza. Todo se hace muy medido y en los partidos estás bien. A medida que pasan los años te tienes que cuidar y medir más los esfuerzos, pero estoy en plenas condiciones”, afirmó Entrerríos hace unas semanas a MD. Llegó al Barça en 2010 y acaba contrato, pero más pronto que tarde se oficializará su renovación.
“Tengo un puesto en el que hay que liderar. Paso más desapercibido que otros jugadores, pero soy central y tengo que intentar trasladar la idea de juego que quiere ‘Pasqui’. Leer la mejor opción para atacar la defensa. Siempre me he identificado con jugadores como Busquets, Xavi o un base de baloncesto. Me comparo con centrocampistas que organizan y hacen que el equipo esté compensado, lo que de verdad hace que funcione todo el movimiento”, dice Raúl.
Un año más, la IHF se olvidó de él entre los cinco candidatos a mejor jugador de 2017, donde incomprensiblemente sí esta Duvnjak, que estuvo seis meses lesionado. Él mismo es consciente de la dificultad de ganar esos premios individuales. “Es muy difícil porque lo más importante son los goles. Estaría muy bien que el balonma- no tuviera unas estadísticas se- rias, una valoración como el ba- loncesto que tiene todo en cuenta. Hay muchas más cosas que el gol”, reivindica él.
“Yo soy tranquilo y considero que en el deporte, sobre todo, tie- nes que mirar por el colectivo. De- be haber un orden porque normal- mente el caos te lleva a la derrota”, recuerda Entrerríos