Algo más que la ciudad de Mozart
La afición de la Real ya se deja oír por las calles más emblemáticas de Salzburgo a la espera del gran desembarco que se producirá hoy
El aliento de 1.900 aficionados acompañará mañana a la Real en Salzburgo. La fiel hinchada txuri urdin ya se está dejando notar en la cuna de Mozart a la espera del gran desembarco que se producirá a lo largo del día de hoy en una ciudad que no solo ofrece vivos recuerdos de las melodías del célebre compositor sino que también cuenta con otros atractivos para que los 90 minutos que se disputen en el Red Bull Arena no sean el único plato del menú por aquellos lares.
Aquí va una guía de lo que ofrece la cuarta ciudad más poblada de Austria, que contagia su historia a través de plazas, monumentos y fortificaciones antiguas espléndidamente conversadas y una naturaleza alpina que coge lo mejor de las regiones del Tirol y de Baviera. Un listado que Steffi Knell, natural de Salzburgo, pone en bandeja para MD.
Si hubiera que enumerar los rincones que bien merecen una visita, la primera posición sería para el Altstadt, el corazón y casco histórico de Salzburgo. Dividido en dos por el río Salzach, en su orilla derecha destacan la Linzergasse, Steingasse y Mirabellgarten, mientras que en el lado izquierdo, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, las bufandas de la Real no desentonarán en la plaza de la Catedral, o Residenzplatz, y Getreidegasse, la arteria principal de la ciudad y donde también se ubica la casa donde nació Mozart. “Es la principal zona de compras pero es muy pequeñita, como todo Salzburgo”, apunta Knell.
Esta ciudadana de Salzburgo, que actualmente reside y trabaja en Suiza, apunta a la fortaleza de Hohensalzburg que vigila la ciudad desde lo más alto. “Las vistas son formidables y se puede subir bien andando durante 10 minutos o cogiendo un pequeño funicular”, explica.
La mejor cerveza del mundo”
Teniendo en cuenta que el Red Bull Arena se encuentra a casi cinco kilómetros del casco viejo, Knell hace su particular recomendación para disfrutar de una buena previa. “Bajando de Hohensalzburg hay un restaurante llamado Stieglkeller ¡que sirve la mejor cerveza del mundo! Es una buena oportunidad para disfrutar de la comida típica de Austria, como el Wiener Schnitzel. No recomiendo el Salzburger Nockerl, tiene demasiada fama para lo que realmente es”. Ahí queda el aviso.
Los que se quieran empapar de buena cerveza, “pueden acudir al Müllner Bräu, una cervecería típica con comida local que se puede adquirir como en un mercado tradicional. La atmósfera es genial”.
Salzburgo es una ciudad pequeña y el ocio nocturno se concentra en el centro. Los más trasnochadores pueden apuntar las siguientes recomendaciones. “Todo está muy cerca”, afirma Knell. “El punto de encuentro suele ser el Escobar y alrededor hay otros bares interesantes como el Russ, Mentor o Flip”.
El imperio Red Bull se nota
Las alas de Red Bull abarcan mucho más que el equipo de fútbol. “Dietrich Mateschitz, el dueño de la empresa, tiene varios locales que merece la pena visitar. El más céntrico es el Carpe Diem, donde destaca el café, y más cerca del aeropuerto se encuentra Hangar 7, un edificio repleto de avionetas y coches de Fórmula 1, la gran pasión de Mateschitz”