MATEU METE MANO A LA LIGA
El colegiado fue decisivo al no expulsar a Chichizola antes del descanso y tras señalar un dudoso penalti al Barcelona Messi avanzó al conjunto azulgrana, falto de claridad de ideas en los minutos finales pese a salir Coutinho y Dembélé
Dos puntos más se quedaron en Gran Canaria. El Barcelona empató (1-1) ante la UD Las Palmas, en un encuentro en el que Mateu Lahoz volvió a ser protagonista negativo. El árbitro valenciano perdonó la expulsión a Chichizola antes del descanso por una clara mano fuera del área y señaló un dudoso penalti que significó el empate local en el segundo tiempo. Ahora el Atlético de Madrid, que visita el domingo el Camp Nou, queda a cinco puntos del conjunto azulgrana. Y eso que Valverde no guardó nada. El técnico extremeño no se equivocaba y no escatimó en esfuerzos.
Tan solo descansó Piqué y dio entrada a Vermaelen de inicio. También Roberto, Iniesta, Messi e incluso Suárez, a pesar de estar apercibido, empezaron en el Gran Canaria. La Liga, antes que nada, pasaba por Las Palmas. El Txingurri, que vive el campeonato partido a partido, ya lo avisó. Su prioridad era llegar con la diferencia de siete puntos al duelo frente al Atlético de Madrid. No podrán ser los 11 que llegó a tener, tampoco siete.
Los diez primeros minutos del Barcelona fueron una declaración de intenciones. Presión alta para robar a campo contrario, ahogando al cuadro canario. De hecho, el Barcelona perdonó el primero en una recuperación tras presión de Leo Messi. El argentino robó la cartera a Ximo Navarro para salir directo hacia Chichizola. Al llegar al área quiso dejársela a Luis Suárez, que tiró al cuerpo del guardameta argentino.
Aviso de Leo y posterior golazo
Las Palmas sufría ante un Barcelona superior. Messi volvió a avisar con un tiro de falta directo que hizo volar a Chichizola, de nuevo salvador. Aún así, el portero no pudo evitar el golazo de Leo en su segundo intento. El 10 clavó un zurdazo imparable a la escuadra del palo derecho. Fue su primer tanto en el Estadio de Gran Canaria. El rosarino tachó otro campo en su lista inacabable.
La superioridad inicial y la ventaja en el marcador hizo que el Barcelona se relajara y levantara el pie tras unos primeros veinte minutos notables. Así, Las Palmas se atrevió algo más y rondó la portería de Ter Stegen: un par de tiros de Halilovic, un mal remate de Calleri casi sin ángulo y un disparo lejano de Etebo que no encontró puerta.
Mano clara de Chichizola
Antes del descanso, el Barcelona se acercó en dos arranques de Messi y en un cabezazo de Umtiti. Aunque la jugada clave del partido llegó antes de finalizar la primera mitad. Messi tiró un pase en pro-
fundidad a Suárez, Chichizola salió del área, despejó mal con el pie y se ayudó con la mano para evitar que el uruguayo marchara solo a puerta vacía. Mateu Lahoz dejó continuar y perdonó la expulsión del portero a pesar de las protestas de Valverde.
Un penalti invisible
El colegiado volvió a ser protagonista en la primera acción en la reanudación. Señaló un protestado penalti que costó entender por posible mano de Digne, totalmente involuntaria, después que el balón diera en el poste. A pesar de todo, previamente hubo faltón sobre Vermaelen en el centro del área que el colegiado tampoco vio. En definitiva, 78 jornadas de Liga después al Barça le pitaron una pena máxima en contra. Y Calleri fue el encargado de transformarla para igualar el choque.
Tras el empate local, Valverde movió ficha y dio entrada a Coutinho y Rakitic por Aleix y Paulinho. El Barcelona pretendía recuperar el control y el ritmo de balón que le había faltado. Pero tampoco se encontró cómodo. Le costó regresar al partido tras la polémica.
Las Palmas se replegó y cerró espacios y al Barça le entraron las prisas. Decisiones precipitadas, imprecisiones y poca claridad de ideas en los últimos metros. Ni con la entrada de Dembélé, que tampoco fue solución. Los azulgrana se volcaron al ataque en busca del gol de la victoria, pero no lograron ni una ocasión clara. La nota positiva, si la hay, es que Suárez no vio la amarilla y podrá estar ante el Atleti en la primera final del curso