Debate sobre el futuro del deporte vasco
La UFDV-EKFB comparece en el Parlamento Vasco para realizar aportaciones al proyecto de la ley de profesiones del deporte en Euskadi
El Parlamento Vasco trabaja desde noviembre en un proyecto de ley que puede tener un gran calado en la organización del deporte vasco, ya que trata de regular las titulaciones que se deberán exigir para ejercer las profesiones del mundo del deporte. Si en el ámbito de la docencia de la educación física, por ejemplo, quedaban claras las exigencias de titulación, en los escenarios referentes a la práctica deportiva, ya sea en clubes o en otro tipo de asociaciones, no se han concretado aún las titulaciones requeridas para ejercer como entrenador o monitor.
Este proyecto centra su objetivo en la salud y seguridad de los deportistas, para lo que se pretende que los técnicos tengan una formación que asegure una actividad deportiva saludable y segura. Por ello, en lo concerniente al mundo federativo, los monitores y entrenadores de los clubes deberán contar con una titulación oficial para ejercer su labor a partir de una fecha en principio prevista para 2022. Un objetivo ambicioso y que prestigia al mundo del deporte, pero que cuenta con el hándicap de convertir en un escenario profesional una realidad que hoy en día está basada en el voluntarismo y con una conciencia de ocio deportivo que no será fácil de cambiar.
Durante el mes de febrero se han desarrollado en la Comisión de Cultura, Euskera y Deporte del Parlamento Vasco comparecencias de diferentes agentes interesados. La pasada semana se desarrolló la de la Unión de Federaciones Deportivas Vascas-Euskal Kirol Federazioen Batasuna (UFDV-EKFB), que realizó sus aportaciones en relación a este proyecto de ley. En nombre de la UFDV-EKFB acudieron Álvaro Suso, gerente de la misma; Germán Monge, presidente de la Federación Vasca de Baloncesto, y Olatz Alkorta, directora deportiva de la Federación Vasca de Piragüismo, tres personas que reflejan los diferentes ámbitos en los que este proyecto puede tener influencia en el deporte federado vasco.
Germán Monge, presidente de una de las entidades con mayor actividad de titulaciones federativas en Euskadi, presentó una enmienda que ayudará a no paralizar la formación de técnicos. “La enmienda prevé que hasta que entre en vigor la ley y se establezca el reconocimiento de capacitación necesaria, que pueden pasar varios años, se permita a quienes hayan iniciado su formación federativa continuarla y que puedan acabarla si lo desean en ese periodo, puesto que si no frenaríamos las posibilidades de formación de muchos técnicos durante ese tiempo”, explicó Monge, que advirtió que puede haber un problema añadido: “Creemos que va a existir un vacío de formación entre el momento en que salga la ley y el convencimiento de los nuevos técnicos a entrar en las exigencias horarias y económicas de las titulaciones oficiales, ya que no son exigidas al instante, por lo que se pueden dar momentos de poco personal cualificado en algunos deportes”.
Por su lado, Olatz Alkorta basó su intervención en los condicionantes económicos y las elevadas exigencias formativas. “Todos estamos de acuerdo en la importancia de la ley, en su necesidad y en las mejoras que va a acarrear. Hablamos de que el deporte es un fenómeno social que afecta a la salud, educación, trabajo, euskera... Es decir, una actividad con valores con mucha transversalidad de interés público, pero con escasa ayuda de otras áreas, como pueden ser salud y educación. Todos estamos de acuerdo con que la práctica deportiva debe de ser saludable y segura. Y todas las medidas adoptadas para ello serán bienveni- das. Pero ¿la exigencia de titulacio- nes lo solucionará?”, preguntó Al- korta, que evidenció las carencias de la oferta formativa: “Para tener ese personal cualificado, harán fal- ta recursos y esta nueva ley genera gastos añadidos que hasta ahora no se tenían, además de una oferta formativa muy exigente e inabordable en muchos casos. También recalca- mos una y otra vez, la importancia del voluntariado, con un alto grado de implicación personal y contribu- ción relevante. Es difícil mantener- les y mucho más, captar a nuevos”.
Por último, Álvaro Suso, además de reivindicar una mayor atención en la ley a la diferente realidad de ca- da disciplina deportiva, incidió en solicitar un plan de financiación re- cogido en la ley, que ayude a los clu- bes y federaciones a implantarla con el fin de que las entidades pue- dan asumir la profesionalización de este sector y muchos deportistas puedan asumir los nuevos costes del deporte, bien con bonificaciones en los cursos de formación o en los contratos laborales de estas profe- siones; en definitiva, un plan de apo- yo a la gestión de entidades deporti- vas que compense la subida de costes para los clubes durante un tiempo determinado.
Por tanto, una ley que ayudará al deporte, pero que aún debe matizar muchos puntos para que su aplica- ción sea positiva
Los entrenadores y monitores de clubes deberán tener una titulación oficial
La dificultad es hacer profesional algo que hoy está basado en el voluntarismo y el ocio