Victoria clave del Bera Bera en Galicia
Supera al Guardés en un partido que parecía cerrado con 9-19 a falta de 20’ y en el que acabó sufriendo para recuperar el liderato
El Bera Bera se acostó como líder tras lograr un importantísimo triunfo en la cancha de un rival directo como el Atlético Guardés (21-22). El conjunto de Montse Puche iguala a 28 puntos en lo más alto con el Rocasa y el propio conjunto gallego, aunque las canarias tienen hoy la oportunidad de situarse como líderes en solitario si se imponen al Valladolid -cuarto-.
Las guipuzcoanas disfrutaron primero y sufrieron después para sellar la victoria. La tuvieron en la mano y luego estuvieron a punto de ver cómo se les escabapa entre los dedos en unos últimos diez minutos aciagos que redujeron la diferencia a la mínima expresión y que obligaron a las de Montse Puche a sujetar el último ataque para no darle al rival opción a empatar el partido. Lo lograron y celebraron a lo grande una victoria que enmenda el error de la pasada jornada en Bidebieta, donde se les escaparon dos puntos que pueden resultar decisivos frente al Rincón Fertilidad de Málaga.
Las donostiarras comenzaron el partido de forma arrolladora. Para el minuto 12 ganaban 1-6 y, cimentando su éxito sobre una defensa impecable, lograron que las locales apenas pudieran anotar tres goles (3-10) en los primeros 20 minutos. Mercedes Castellanos estaba desquiciando a sus rivaless con paradas de todos los colores. Por eso, al descanso se llegó con siete puntos de diferencia a favor de las de Donostia (7-14) y el Super Amara se las prometía muy felices. El incio de la segunda mitad tampoco hacía presagiar que el sueño se podía convertir en pesadilla e incluso las de Puche lograron la mayor ventaja del encuentro (9-19) en el minuto 40. Pero entonces las porteras se intercambiaron los papeles y de héroe que estaba jugando la visitante Castellanos lo tomó prestado la meta local, Carratu. En los últimos minutos, el Guardés logró lo mismo que el Bera Bera en los primeros 20: que su rival sólo anotara tres tantos. Por eso, ante el delirio del pabellón de A Sangriña, conocido como O Inferno, las gallegas fueron recortando distancias.
El Bera Bera parecía un equipo diferente al de la primera mitad, con muchas pérdidas e imprecisiones le daba muchísimas alternativas a un Guardés que se vino arriba con el impulso de su gente hasta colocarse a un solo gol en el último minuto. El momento era crítico para las guipuzcoanas, que tenían el balón a falta de menos de 20 segundos para el final del duelo.
Puche pidió tiempo muerto y dijo: “Nos queda un ataque y va a ser gol”. No lo fue, pero con un golpe franco y con Aramendia groggy se terminó el partido y el Super Amara Bera Bera logró un triunfo vital para seguir en la lucha por el título. Por delante quedan nueve partidos en los que el Super Amara Bera Bera no tiene que jugar ante ninguno de sus dos rivales directos y en los que no podrá fallar si quiere llevarse la liga