Mikel Landa ya piensa en el País Vasco
El ciclista del Movistar tiene en la ronda vasca su primer gran examen del año
La primera parte de la temporada que está ofreciendo Mikel Landa está siendo de nota. El nuevo integrante de Movistar empezó a rodar este 2018 en la Vuelta a Andalucía y ya en la ronda andaluza, pese a los pocos kilómetros que acumulaba en sus piernas, ya se dejó ver en algunas etapas, siendo protagonista en varias jornadas. De hecho, fue 2º en la 4ª etapa y acabó 6º de la general. Unas sensaciones que se mantuvieron en la siguiente cita en la que ha tomado parte hasta el momento el de Murgia, la Tirreno-Adriático.
De nuevo rodeado de buena parte de las mejores piernas del pelotón internacional, logró la primera victoria de la temporada en la cuarta jornada de la carrera de ‘los 2 Mares’, después de demostrar un enorme dominio de la situación y la constatación de su óptimo estado de forma. Tras dedicar el triunfo al ex ciclista y amigo Michele Scarponi, fallecido en abril de 2017, hubo quien pensó que Mikel ya podía aspirar a ganar la Tirreno-Adriático, pero lo cierto es que ésta no era la máxima que él llevaba en la cabeza antes de viajar a Italia, donde sólo tenía en mente ir acumulando kilómetros con vistas a la primeras piedras de toque que verdad tenía marcada en rojo en su hoja de ruta. Y ésta no es otra que la Vuelta al País Vasco, aunque
con anterioridad disputará alguna que otra clásica.
La de este 2018 será la quinta participación de Landa en la Vuelta al País Vasco. La primera fue en 2013 y no acabó, y la última en 2016. Hasta la fecha ha logrado dos victorias de etapa, en 2015 y en 2016, pero este 2018 quiere ser más ambicioso y buscará cotas mayores. La clave de esta buena dinámica hay que buscarla en los dos inviernos tranquilos, sin lesiones, que ha acumulado hasta la fecha y que le permiten mantener una línea constante. La Vuelta al País Vasco se disputa del 2 al 7 de abril