Ambiente gris en Zubieta
Jornada fría, rostros serios y escasez en un entrenamiento integrado por diez futbolistas el día en que Rulli vuelve a trabajar en la portería
Deprimente fue la noche en Anoeta contra el Getafe y no es que la mañana posterior fuera mucho más festiva. El ambiente permanece gris en el seno de esta Real con el rumbo desnortado. Y para norteño, el tiempo, con chaparrones ocasionales, como anunciando que las aguas bajan turbias. La Real se entrenó bajo un clima frío, los rostros eran serios y la sesión fue escasa de efectivos: diez futbolistas de emplearon del primer al último minuto.
Gero Rulli se puso los guantes para hacer trabajo de portería por primera vez desde que se lesionó en
Salzburgo. Hasta ahora había realizó algún ejercicio específico con balón, aunque en solitario. Participó en los rondos junto al resto y luego
se dedicó a parar balones por su cuenta, mientras Toño Ramírez y Juanjo Garrancho, guardameta del filial, completaban la sesión ordinaria. Moyá no salió al Z2 por lesión.
Aparte del portero balear, Navas, Zubeldia y Willian José fueron los titulares del sábado que causaron baja. El brasileño se marcha esta semana con Brasil después de haber sido convocado por primera vez por la ‘canarinha’. Sí saltó al campo el resto de la tropa que actuó de inicio contra el Getafe: Odriozola, Moreno, De la Bella, Illarramendi, Zurutuza, Canales y Oyarzabal. Cumplieron con los pertinentes ejercicios de recuperación y se marcharon con gesto fruncido.
Agirretxe ha sido aita
Xabi Prieto y Carlos Martínez continúan ausentes y tampoco hicieron acto de presencia en un entrenamiento marcado por siete ausencias, entre ellas Imanol Agirretxe, quien acababa de ser aita de una recién nacida llamada Nea. Es la segunda hija para el ariete txuri urdin y su esposa, Ainhoa. Todo este cúmulo de bajas provocó que Zubieta fuera un solar.
Con Garrancho y Toño Ramírez se ejercitaron estos ocho jugadores de campo: Llorente, Juanmi, Januzaj, Pardo, Aritz Elustondo, Kevin, Bautista y Guridi. Eusebio dirigió el entrenamiento entre cabizbajo y silencioso. Se desprendía cierto aroma a epitafio de una mañana gris