“PARA MÍ ES UN RECONOCIMIENTO PODER ESTAR AHÍ”
Me enteré por Instagram. Me hizo mucha ilusión. El Annika fue una sorpresa, me dio motivación”
La golfista Ainhoa Olarra (Donostia, 1995) avanza a pasos agigantados. Actualmente se encuentra en California mientras compagina los estudios, un doble grado de Management & Economics impartido por la Universidad de Carolina del Sur, con una carrera deportiva como aficionada al golf. Este año tendrá que decidir si da un paso más y se hace profesional, ya que hasta el momento compite como amateur, donde está brillando con luz propia tanto en su universidad como en diferentes torneos, lo que le ha valido para ser una de las candidatas al prestigioso premio Annika Award. ¿Cómo lleva vivir tan lejos de casa?
Este es mi cuarto año fuera y al principio fue muy duro. No había españolas que conociera en ese momento. Además, no estaba jugando muy bien, pero era lo que tocaba. Antes también estuve en Madrid, pero no es lo mismo. Apenas sabía inglés pero con el paso del tiempo se me hizo más fácil estudiar. De hecho, me compré una grabadora, pero ahora ya entiendo bien. ¿Cómo es su día a día por Carolina del Sur?
Mi día a día cambia mucho. Entrenamos todos los días de la semana menos uno. Los lunes tengo clase desde las 8.00 hasta las 11.40 horas. A mediodía me voy a entrenar hasta las cinco y media. Los martes y jueves tengo gimnasio de seis de la mañana a siete y cuarto, luego tengo clase de 8.30 a 13.00 horas y ese día entrenamos a las cuatro y media. Luego suelo tener tutoría por la noche, a las ocho o nueve. Los miércoles tengo clase de 8.00 a 11.40 horas, y me entreno hasta las 17.45 horas. El campo de golf está bastante lejos, a media hora. Los viernes voy a clase como el lunes y luego también solemos jugar. El sábado, si no tenemos torneo, normalmente entrenamos tres horas. Y el domingo libro, excepto antes de un torneo. ¿Se compagina bien la carrera universitaria con el deporte?
Antes de venir estuve estudiando en la UPV y, dentro de las posibilidades que había, me ofrecieron muchas. En Estados Unidos el método de aprendizaje es muy continuo, más sencillo pero tenemos muchas tutorías. En cuanto a los profesores hay de todo, unos te ayudan más y otros pasan más de ti. Es candidata al prestigioso Annika Award. ¿Cómo se enteró de la noticia? Aquí hay una persona que está siempre muy al día de todo y me enteré por Instagram. Es un reconocimiento poder estar ahí, me hizo mucha ilusión. El Annika fue una sorpresa y me dio motivación. Además, también me enteré sobre mi convocatoria para la Arnold Palmer Cup, una competición que enfrenta a jugadoras de Estados Unidos contra internacionales que están estudiando en las universidades americanas. ¿Qué opina de Jon Rahm? ¿Es un referente?
Me gusta mucho y le conozco. He jugado torneos con él cuando tenía 13 años. También estuvimos juntos en Madrid. Jon Rahm hay uno. Tiene una cabeza que es increíble. Cuando estuvo en Estados Unidos ganó muchísimos torneos, es un fuera de serie. También me gusta Azahara Muñoz, que es malagueña. Está ante su último año como amateur. ¿Se ve capaz de dar el salto al profesionalismo? Es una decisión complicada que tengo que tomar en dos meses. Tengo que ver si realmente me compensa dedicarme al golf. Vivir en California será una decisión que dependerá de la que tome, ¿no? Sí, según la decisión que escoja. Ya se verá. Solo sé que vuelvo a Donostia en verano y navidades. Hace dos meses que me vine de España por vacaciones