Endoia y Azurki, un tándem ideal para detonar la carrera
La quinta etapa arranca en Vitoria y concluye en Eibar
Primoz Roglic acaricia con una mano la victoria final de la Itzulia aunque el esloveno no se puede relajar en las dos jornadas que restan. Para empezar, la quinta etapa, que arranca en Vitoria y desemboca en Eibar, puede conseguir que la carrera salte hoy por los aires. Al cabecilla del LottoJumbo le espera una emboscada tras otra.
El cómodo inicio, que volverá a poner al pelotón cerca del nivel del mar, servirá para que el resto de los gallos que acechan al líder le pongan a prueba en un final explosivo. Tres puertos asoman en la recta final de la quinta jornada, arrancando con Elosua, una subida de ocho kilómetros con una pendiente media del 6%.
Los primeros ataques, sin descartar que alguno de los perseguidores busque la heroica con un lanzamiento lejano, darán paso a una pareja de colosos con ganas de protagonismo.
El alto de Endoia, de segunda categoría y un ascenso de siete kilómetros con un 5,1% de desnivel medio, pasará el testigo a Azurki, el gran invitado de esta Itzulia.
Con solo cuatro kilómetros de descenso para soltar las piernas y preparar la próxima escabechina, Mollema, los hermanos Izagirre, Landa y Quintana y otros ases como Konrad tratarán de asaltar a Roglic en una montaña dura, con carreteras estrechas y una pendiente constante que reventará las piernas a más de uno. Azurki hace honor a su etiqueta de primera categoría, con casi seis kilómetros de subida y una pendiente media del 7,6%. Un auténtico muro.
Desde la cima hasta la meta de Eibar solo habrá 20 kilómetros