La despedida de Imanol Alguacil
Dirigirá ante el Leganés su último encuentro en Anoeta después de cambiar el chip de una Real que ha soñado con Europa hasta el final
La trayecto de Imanol Alguacil como técnico de la Real tendrá punto y final en Anoeta. El oriotarra dirigirá ante el Leganés su último encuentro de local a los mandos del conjunto txuri urdin con unos números y unas sensaciones que dejan al guipuzcoano como el principal culpable de que el equipo haya cambiado el chip. Su papel no era nada sencillo. Después del complicado bache que atravesaba la Real con Eusebio Sacristán, el presidente Jokin Aperribay decidió prescindir de los servicios del vallisoletano y acudir a un técnico que ha cuajado una temporada increíble al mando del Sanse, situándolo entre los cuatro primeros del Grupo II de Segunda B junto a Aitor Zulaika y siendo uno de los clubs más en forma de toda la categoría de bronce.
El primer encuentro ante su afición ilusionó a toda Gipuzkoa después del buen juego desplegado por los txuri urdin. A los mandos de un Rubén Pardo que no jugaba desde el mes de octubre en competición liguera, la Real venció por 5-0 al equipo revelación de la temporada, el Girona, mostrando un juego directo, veloz y eficaz, algo que hasta entonces se había eclipsado completamente con Eusebio.
La victoria del equipo no sólo mostró optimismo a la hinchada realista, sino que además la parroquia vio que en el banquillo tenían a un técnico con garra, con mucho nervio y muy cercano a sus jugadores, ganándose así la confianza de una afición de capa caída en los últimos meses.
La confianza que el propio entrenador ha mostrado hacia todo su plantel ha sido total, consiguiendo que toda la plantilla esté enchufada cada vez que rueda el balón. Ha recuperado a jugadores como Rubén Pardo o Aritz Elustondo, que participaron muy poco a las órdenes de Eusebio durante la última temporada.
Anoeta es un fortín
Su buen paso por la Real no es pura casualidad. La segunda vuelta que ha registrado el Sanse a sus mandos llamó la atención de propios y extraños, siendo el primer equipo que consiguió batir a domicilio al líder, el Mirandés. Con el primer
equipo, no fue mucho menos. Ha conseguido ganar por ahora los tres encuentros que ha disputado en Anoeta, anotando 3 goles a clube como el Athletic o el Atlético de Madrid, siendo este último un equipo que no recibía tantos goles en competición liguera desde aquel 12 de diciembre de 2016 ante el Villarreal en el Madrigal.
De continuar en este línea ante el Leganés, Imanol registraría un pleno de victorias en Anoeta, con cuatro victorias en cuatro encuentros. Lo cierto es que para saber qué técnico fue el último en conseguir tres victorias en sus tres primeros partidos como local, al igual que el oriotarra en estos instantes, hay que echar la vista atrás hasta la temporada 1997/98, con Bernd Krauss como entrenador. El alemán registró cuatro victorias consecutivas, siendo el Racing (1-0), Valladolid (3-0), Celta (2-1) y Mérida (2-1) sus víctimas