Las lesiones frenaron el tren
El Beasain pone punto final a una temporada irregular que terminó dejando a los de Urtzi Arrondo al borde del playoff de ascenso
El Beasain acaba la temporada con la cabeza bien alta. A pesar de quedarse fuera de los playoff, el conjunto de Urtzi Arrondo ha sido un auténtico dolor de cabeza para gran parte de sus rivales durante toda la temporada.
El técnico es consciente de que “iba a ser un año difícil después de entrar en playoff el pasado año”, y apunta que eso provocó que se les hiciera la temporad “muy larga”.
Al Beasain le costó encontrarse a sí mismo al comienzo, con un inicio irregular y sin tener tan claro su destino. Fiel a su estilo, el club vagonero retomó la senda de la victoria enseguida, escalando hasta lo más alto de la clasificación en la jornada 16 gracias a “una muy buena racha”. Fueron líderes “con bastante solvencia”, pero el invierno pasó factura a un equipo que fue sufrió “muchas lesiones” y “salidas de jugadores”. Eso supuso que los de Arrondo acabaran “penalizados, teniendo en cuenta en la categoría en la que estamos”.
Demasiado castigo
La buena temporada que estaba cuajando el conjunto vagonero se vio empañada por la lesión de Pablo Balerdi, un futbolista que, según indica Urtzi Arrondo “estaba a muy buen nivel” y “marcando las diferencias”. El jugador sufrió la rotura del ligamento cruzado, lo que unido a la marcha de ‘Kaxe’, “que estaba siendo el pichichi de la categoría con 13 goles y veía puerta muy fácil”, al Rápido de Bouzas, mermó el potencial vagonero. Todo ello hizo que las cosas se fueran torciendo “hasta tal punto que también se nos lesionó Ion Iturbe, el portero, que sufrió una rotura parcial del ligamento cruzado en la rodilla”. Y, en la recta final de la temporada llegó la guinda, la baja de oro futbolista importante como Iván Claver, que fue operado del tobillo: “Para nosotros era un jugador muy importante en los últimos años”, apunta Arrondo quien considera que esas lesiones y bajas “nos han marcado mucho , ya que tres de estos jugadores eran referencias ofensivas”.
A pesar de todo, el Beasain no se rindió y siguió luchando por “dar la cara” y “aguantar hasta el final”.
“La temporada es buena”
Haciendo un balance final de la temporada, Arrondo se muestra satisfecho, ya que “hemos acabado en un quinto puesto que es positivo y hemos superado la barrera de 60 puntos”.
Es consciente de que, a pesar de ser un buen año, da un poco de “pena” no estar compitiendo en el playoff de ascenso como la temporada pasada, pero es consciente que para eso “hay que llegar bien a marzo y Semana Santa” y no ha sido el caso.
En la primera vuelta “el equipo afianzó sus objetivos e incluso estábamos con la ilusión de pelear por el primer puesto”, pero “con tanto contratiempo tuvimos que bajar el pistón. Sabíamos que iba a ser difícil aguantar en los puestos de arriba y aunque lo hemos intentado, no hemos podido”.
Las cuatro derrotas sufridas en los últimos cinco encuentros dejaron sin opciones a un equipo que, tras las vacaciones volverá a la competición con “más fuerza que nunca”