Prodigioso Altuna
El amezketarra, con 22 años, se impone en su primera final a Olaizola II
Jokin Altuna es el nuevo campeón del Manomanista, tras imponerse por 14-22 en la vibrante final disputada ayer en un frontón Bizkaia lleno hasta la bandera. El duelo generacional que se planteaba en pos de la más codiciada de las txapelas se resolvió a favor del joven delantero de Amezketa (22 años), frente a Aimar Olaizola (38), que no pudo alcanzar el registro de cinco entorchados de su eterno rival, Juan Martínez de Irujo, en la considerada competición reina.
Aunque, visto el rendimiento ofrecido a lo largo del torneo, a Olaizola II no se le puede descartar para nada en próximos compromisos, lo que ayer se vivió en el frontón Bizkaia olía a traspaso de poderes. Ante uno de los más grandes maestros de la historia, ese ‘Harry Potter’ llamado Jokin Altuna, ese joven aprendiz de brujo de las canchas, se doctoró en las ciencias ocultas del mano a mano calándose, a modo de birrete, la ansiada txapela. El gipuzkoarra ya había desplegado todo su arsenal de trucos en los reducidos márgenes del cuatro y medio, pero ha disipado todas las dudas sobre su capacidad extendiendo su magia más allá de los límites del acotado y despojándose de esa etiqueta de pelotari ‘corto’ que algún escéptico se empeñaba aún en endosarle.
El partido arrancó con trazas del viejo mano a mano, con los dos pelotaris enzarzados en un intercambio de golpes a bote, más por precaución que por otra cosa. Pero enseguida se desataron las hostilidades y se entró en el ritmo frenético propio del juego actual, sin permitir al cuero tocar apenas el suelo. Tras un ‘tuya mía’ sin dominador claro, la contienda empezó a decantarse a favor del guipuzcoano a partir del 8 iguales. En ese momento, Altuna III encadenó una tacada de seis tantos, haciéndose con las riendas del vertiginoso peloteo y moviendo bien a su rival, obligándole a responder en posturas forzadas.
Tras el 8-14, rubricado con un ‘buruz gain’ ante el que Olaizola ni siquiera hizo ademán de correr para intentar salvarlo, el de Goizueta parecía derrotado. Por fortuna para el pelotazale, no era así. El navarro logró cortar la sangría con una precisa dejada al txoko y cogió una potente ola que le arrastró hasta un 1314. Cuando acariciaba la igualada a 14, relamiéndose ante un resto entregado de Altuna, Aimar no supo acabar en el ancho y pasó de tener el tanto hecho a verse sometido por el guipuzcoano, que con un dos paredes de aire dio inicio a otra tacada, esta vez definitiva.
El veterano campeón exprimía sus reservas para intentar reengancharse al partido, pero fue en vano. Altuna III, pleno de confianza, veía el hueco con facilidad y aumentaba su botín. Solo un error puntual del amezketarra, que se llenó de pelota y la mandó muy desviada a las tablas, permitió a Olaizola llevar a su casillero el cartón 14, el último para el bando rojo. Ese color lo vestirá Altuna durante este próximo año, tras sellar con una bonita dejada el txoko su victoria en un final en la que fue, de largo, el mejor, algo que se puede extender a todo el campeonato.
Doble campeón en vigor
Para el de Amezketa, es su primera txapela del Manomanista y la segunda de Primera tras la del Cuatro y Medio, torneo del que también es vigente campeón. A los 22 años, tiene toda una carrera por delante para engordar su palmarés. Y, como no dudó en reconocer el ‘maestro’ Olaizola II, quien en buena parte se ve reflejado en las maneras que despliega Jokin en la cancha, Altuna III juega mucho más que él mismo a esa edad. Otra cosa será que logre mantener ese poder mágico durante tantos años. No será fácil
REACCIÓN COLORADA Olaizola se acercó a un 13-14, pero no logró culminar la voltereta
LA SENTENCIA Con un único regalo de por medio, Jokin cortó la buena racha rival y se fue al cartón del 22
PRINCIPIO DEL FIN El partido empezó a decantarse al ir Altuna del 8 iguales al 8-14