La esperanza txuri urdin

Son muy pocas las cosas positivas que ha dejado esta temporada en lo que a la Real se refiere. Si como todos defienden, lo colectivo está por encima de lo individual, la entidad blanquiazul no ha estado a la altura. Eran muchos y muy atractivos, a la vez que muy exigentes, los objetivos que se pusieron al principio del campeonato y la Real ha estado muy lejos de conseguirlos. Por lo que la valoración no puede ser más que negativa. Pero dentro de todo este desencanto general, suavizado de alguna manera, sobre todo, por las victorias frente al Atlético y al Athletic, hay ciertos aspectos que invitan al optimismo y uno de ellos no es otro que la confirmación de Mikel Oyarzabal. Quizá no hacía falta hacer esta constatación porque el eibartarra, desde que llegara al primer equipo, ha demostrado tener un potencial solo al alcance de los privilegiados. Pero estos 12 goles que ha marcado en Liga, le meten ya de lleno en el panorama internacional, con todo lo que ello significa. No sería de extrañar que alguien este verano pusiera encima de la mesa los 50 millones de su cláusula de rescisión -60 para el Athletic-. Viendo los parámetros en los que se mueve el fútbol y lo que se paga por otros jugadores, la inversión en Mikel Oyarzabal no conlleva riesgo alguno. Con Prieto fuera de la Real, la afición ve ahora a Mikel como ese futbolista que puede seguir los pasos del donostiarra y defender la zamarra blanquiazul durante muchos años. Esa es la esperanza de la parroquia realzale. No será sencillo que lo pueda conseguir. Más que nada porque como siga creciendo como lo ha hecho esta temporada, será complicado retenerle. La última palabra la tendrá el propio jugador, como siempre. De momento, habrá que seguir disfrutando ¿del nuevo ‘10’ de la Real?