Simona Halep ya es una campeona
Reaccionó al verse abajo ante Stephens, y dejó atrás tres experiencias frustrantes para relevar a Ruzici (1978)
La rumana Simona Halep, 26 años, se había tomado con mucha paciencia y filosofía el sambenito de perdedora de finales importantes. “He perdido tres de Grand Slam y nadie se ha muerto, así que todo está OK”, señalaba con tanta ironía como acidez ante el continuo recuerdo a las derrotas en París de 2014, ante la rusa Maria Sharapova, y 2017, cuando dejó escapar un favorable 6-4 y 3-0 frente a la letona Jelena Ostapenko.
Tampoco logró el premio gordo esta temporada en el Open de Australia, se lo arrebató la danesa Caroline Wozniacki. Y buena parte de las 15.000 personas que llenaron el Estadio Philippe Chatrier temieron que la nº 1 se quedase una vez más a las puertas cuando cedía 3-6 y 0-2 ante la estadounidense Sloane Stephens, 25 años y vigente campeona del Open USA.
“Tengo más experiencia, me siento más relajada”, significó Halep, arropada por su entrenador australiano Darren Cahill y los rumanos Virginia Ruzici y Ion Tiriac. Y cuando se vio al borde del abismo, dominada por la talentosa adversaria, Simona se quitó de repente todos los complejos, se olvidó de la trascendencia de la cita. Era a todo o nada, y se lanzó a por el partido con decisión.
Encadenó cuatro juegos para adelantarse 4-2 en la segunda manga, y no hubo paso atrás ni tan siquiera cuando reaccionó la americana (4-4), que había ganado las seis finales profesionales disputadas previamente. Liberada de nervios, Halep tiene todo para ser una campeona de Roland Garros. Y ya lo es porque ató la traidora presión y desplegó su arsenal de condiciones para imponerse por 3-6, 6-4 y 6-1 en 2h.03’.
Simona Halep entra en el palmarés de un Grand Slam que marca un antes y un después en la carrera de un tenista. Sucede a su ahora mánager Virginia Ruzici, la mejor en 1978 tomando el relevo de Ilie Nastase (1973).
Es su decimoséptima corona en el circuito profesional, séptima en tierra batida y segunda de la campaña, que abrió triunfando en Shenzhen. Finalista en Roma antes de París, se embolsó 2.200.000 euros y recibió la Copa Suzanne Lenglen de manos de la tres veces campeona española Arantxa Sánchez Vicario (1989, 1994 y 1998).
Lloró de emoción Halep, que a continuación subió a la grada para festejarlo con sus familiares y miembros del cuerpo técnico
Simona Halep “Soñaba con este momento desde que empecé a jugar a tenis” “Cuando estaba ‘break’ abajo en el segundo set, pensé ‘ya ha pasado, tengo que relajarme y disfrutar’, y remonté” Sloane Stephens “Los periodistas sois mis mayores enemigos. Solo estáis interesados en recordar las veces que pierdo fuera de Estados Unidos”