“Una pena por Nieve, pero tenía que ganar”
Geraint Thomas, ganador de etapa y nuevo líder, lamentó arrebatarle la victoria su ex compañero en el Sky, a quien apoda ‘Frosty’
La durísima etapa de ayer sirvió para quitar el grano de la paja y para ver que el Sky sigue siendo el Sky, que tiene a sus dos mejores ciclistas, Geraint Thomas y Chris Froome, en plena forma, que Tom Dumoulin ha presentado de nuevo la candidatura al podio de París y que la táctica arriesgada de Movistar no acabó dando sus frutos, con un Alejandro Valverde que no pudo culminar su valiente ataque, con un Mikel Landa que sufrió más de lo esperada y con un Nairo Quintana que fue incapaz seguir el ataque de Daniel Martin y Froome.
Por esta suma de razones ayer al acabar la etapa el optimismo iba por barrios. Thomas, ganador del día y nuevo maillot amarillo, reconocía que “no me lo esperaba para nada ser líder. Tenía pocas opciones, ataqué y me fui a por Dumoulin por instinto. Es un honor llevarlo. Ya lo hice el año pasado y hacerlo dos años seguidos es realmente bonito”. Tuvo el galés un gesto cariñoso hacia su ex compañero en el Sky Mikel Nieve, a quien atrapó a falta de poco más de 300 metros. “Fue una pena. Vi a ‘Frosty’ (Nieve). Es un buen compañero, pero tenía que ir a por la victoria”. Chris Froome aplaudió la iniciativa de su compañero y dejó claro qué rueda tiene que seguir a partir de ahora: “El ataque de Thomas tenía sentido. Era perfecto. No hacía falta que habláramos, Geraint tenía que hacer lo correcto y seguir adelante. Dejé que se fuera”, antes de añadir que ahora “la principal amenaza para nosotros ahora es Tom Dumoulin. Ha hecho una etapa impresionante”.
La decepción se palpaba en Mikel Nieve y en los Movistar. El de Mitchelton Scott reconocía que fue “una lástima no ganar porque quedaba muy poco para la meta. Lo he intentando todo y venía a tope, pero no ha podido ser”. Mientras en Movistar, Nairo Quintana se sinceraba al decir que “no nos hemos encontrado como queríamos” y cruzaba los dedos para que “aunque he perdido unos segundos, espero que no sean definitivos”. A su lado, Mikel Landa explicaba que “en el primer puerto ha empezado a dolerme la espalda y en la parte final de la etapa no he podido seguir el ritmo de cabeza”, a la vez que avisaba que seguiría intentándolo