En Toyota, como en casa
Alonso disfruta del gran ambiente que se ha creado en el equipo
¿Cuantas veces hemos oído a los pilotos decir que el compañero de equipo es el primer rival? Pues en Resistencia, dicha frase no tiene mucho sentido, y es uno de los puntos que más disfruta Fernando Alonso en su primera temporada en el Mundial de Resistencia.En el hospitality de Toyota es usual ver a los pilotos comiendo juntos, relajados, riéndose y bromeando sin parar. En Toyota, pese a que los tres tripulantes de cada uno de sus dos coches estén jugándose el campeonato, hay una norma no escrita primordial: Lo principal es la marca, y el objetivo es que las dos primeras posiciones sean de la firma nipona. Da igual la posición.Entendido eso, todo cambia.
“Es como una familia. Cuando estás en el coche quieres ganar al otro coche, pero después, fuera somos todos amigos, honestamente, muy buenos amigos”, expresó a MD Sébastien Buemi, destacando que “Fernando disfruta siendo parte del equipo, nos divertimos”.
El propio Alonso lo explicaba a este diario, que todos juntos juegan a la consola en un cuarto, a cartas, y lo pasan bien. Es algo nuevo para él.
En el ‘Gran Circo’, cada piloto vive en una burbuja de concentración de la que intenta no salir.Y cada vez que Alonso llega al WEC pasa de trabajar con sus propios mecánicos e ingenieros a compartir un objetivo con dos pilotos más, un mismo asiento, con mismos fisios e ingenieros y eso hace que se sienta como parte de una familia. Por eso, no es de extrañar que con Toyota no necesite la presencia de personas que en la F1 y allá dónde va son su sombra, como por ejemplo sus fisios Edoardo Bendinelli y Fabrizio Borro. Toyota cuenta con sus propios profesionales y todos ellos son activos compartidos entre los pilotos.
Precisamente, Toyota hace las cosas pensando en que sus pilotos siempre estén juntos. En los test comparten un mismo coche para irse de los circuitos, como reveló Fernando y el propio Pechito comentó que “ya sabía que a Alonso le sorprendería el espíritu que hay”
“Compartes el coche pero también muchas horas en pista, de pruebas y noches. La resistencia, al ser tan sacrificada, se crea un vínculo muy importante. El Fernando que hay delante de una cámara y el que conocemos internamente es totalmente distinto, porque con nosotros es realmente él y es uno más, es muy bonito tenerlo con nosotros”, explicó el argentino
Una de las cosas que más destaca Fernando es el compañerismo que hay en el box
La marca nipona piensa en cada detalle para que sus pilotos siempre estén juntos