El fichaje de Setién
El Betis vetó por completo la salida de Toni Sanabria, que la pasada temporada se rompió los ligamentos cruzados, porque a Quique Setién le demostró en solo tres meses el curso anterior que es un jugador diferente.
El nombre de Toni Sanabria hace ya muchos años que sueña entre la élite futbolística a pesar de que solo tiene 22 años. Criado en la cantera del Barça, viste ahora los colores del Betis, un club que ha vetado su salida, con importantes ofertas de la Premier League, cuando todos la daban por segura teniendo en cuenta la cantidad y calidad de los jugadores verdiblancos en su misma posición. Pero Quique Setién, un sabio, dijo que no, que lo necesita, y no hubo nada más que hablar en el Benito Villamarín.
No es de extrañar esta negativa del técnico del Betis, conocedor del juego y del talento del paraguayo, algo que a Toni le sobra y se lo empezó a demostrar a inicio de la pasada campaña. Sumó 9 tantos en 20 partidos, siendo el máximo goleador de los andaluces y, posiblemente, el jugador más destacado en un periodo complicado para el equipo, hasta que la rodilla le dijo basta. En concreto sus ligamentos, que le dejaron fuera de la temporada en noviembre, pasando cinco meses en el dique seco. Volvió el 11 de abril de 2018, justo en la misma fecha en la que regresó el curso anterior, cuando una lesión en la ingle le mantuvo alejado de los terrenos de juego otros tres meses. Porque si algo ha detenido a Sanabria han sido unas lesiones constantes. En su corta carrera ya ha sufrido 8 lesiones, cinco de ellos de larga duración. De hecho, a consecuencia de su última lesión se descubrió a Loren Morón, titular el viernes ante el Levante.
Pero vuelve a empezar otro curso, con Sanabria recuperado, y aunque pueda parecer que parte por detrás de sus competidores, el paraguayo es de esos jugadores que necesita el Betis. Un rematador como pocos hay, de los que saben leer los espacios a la perfección dentro del área y de los que tira del equipo sea cual sea el rival. Una pieza indispensable para el equipo, que acusa la ausencia de jugadores así. Sergio León y Loren son de perfiles más parecidos, mientras que Toni da la alternativa.
Sanabria llegó a Barcelona en la etapa alevín y se marchó al Blanca Subur, equipo de División de Honor, donde militaba su primo. Solo duró temporada y media. Suficiente. Reventó la liga a goles y eso le valió para fichar por el Barça. Allí el gol siguió siendo el denominador común hasta que decidió salir con edad juvenil, entendiendo que llegaría más rápido a jugar junto a los grandes lejos del Camp Nou, donde solo llegan ciertos elegidos.
En la Roma no tuvo oportunidad pero si en el Sporting de Gijón, en el que con 19 años hizo 11 goles. También en el Betis, sobre todo de la mano de Setién, quien sabe que este jugador tiene algo difícil de encontrar y que se paga caro, olfato de goleador. El proyecto verdiblanco empezó con dura derrota ante el Levante, pero pinta bien y, si las lesiones lo respetan, Sanabria puede volver a ser una de las referencias. Que se preparen las defensas