Mundo Deportivo (Gipuzkoa)

Seis txapelas y subiendo

Urriza liquida a Uterga en la final del torneo Individual para seguir marcando época · “Las sensacione­s fueron las mejores”, confirma

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Javier Urriza Era algo impensable cuando empecé a jugar a remonte” Xanti Uterga Ha sido un querer y no poder, no di mi nivel y he estado fuera”

No hay quien le tosa a Javier Urriza en el torneo Individual de remonte. El pamplonés demostró una vez más, y ya van seis, que le tiene cogida la medida a este formato y se coronó con honores por cuarto año consecutiv­o. Solo San Miguel, en 2014, ha sido capaz de romper el reinado que comenzó el delantero en 2012.

Uterga tuvo que claudicar a pesar de haber realizado un torneo exquisito, digno de un campeón. De hecho, se podría decir que Urriza le venció con más comodidad de lo esperado, dejando a un lado la final igualada que se vaticinaba. El campeón lo hizo todo bien y al de Doneztebe no le salió prácticame­nte nada, solo en el arranque de la final fue capaz de presentar algo de batalla al dueño de la txapela. El 2-3 fue el último espejismo que atisbó Uterga, ya que a partir de ahí el de Pamplona cogió la autovía en dirección a la victoria. Del 7-3 se pasó al 15-6, y tras una pequeña reacción que dejó el marcador en 15-9, se acabó cualquier atisbo de remontada. El 20-11 dejó encarrilad­o el triunfo para Urriza, que con la balanza a favor se creció para difuminar las probabilid­ades de su adversario.

De hecho, a Urriza le bastó con acertar con el saque y dominar el peloteo. No tuvo que tirar de magia para sacar de punto a su contrincan­te, sino que le sonrió la suerte poniendo la pelota atrás. En el lado contrario asomó un Uterga errático, incapaz de restar con criterio y dominado a las primeras de cambio. El de Doneztebe trató de restar bien, pero no lo logró, tuvo muchos problemas con el resto y después ya se vio dominado en el peloteo con el rival jugando de cara. Las veces que intentó alguna jugada falló y tampoco tuvo suerte en algunas pelotas no excesivame­nte complicada­s que se le arrimaron.

Con unas apuestas que fueron a su favor desde el inicio, el séxtuple campeón necesitó menos de una hora para colocar su nombre como dueño de la txapela. Otra vez. Urriza realizó 19 tantos en el peloteo y nueve de saque, Uterga se quedó en ocho y tres.

“Las finales, para ganarlas”

Javier Urriza estaba feliz con la txapela. “Las sensacione­s han sido las mejores de todo el torneo”, confirmó, apuntando que “las finales están para ganarlas y he tenido la fortuna de poder ganar ”. El número de txapelas va subiendo y ya son media docena las que adornarán su casa a partir de ahora. “Es algo impensable cuando empecé a jugar a remonte. Ahora toca disfrutarl­o y saborearlo”, concluyó.

Por su parte, Xanti Uterga hizo de tripas corazón. Resignado, el subcampeón recalcó que “ha sido un querer y no poder. Lo que más pena me da es no haber dado mi nivel habitual, he estado fuera del partido”.

Al de Doneztebe le dio rabia no poder responder a los numerosos aficionado­s que se acercaron hasta el frontón Galarreta para apoyarle.

“Estaba con toda la confianza pero en el día clave no he acertado y no he dado todo lo que tengo dentro. Tenía claro que había que disfrutar y no ha sido así”, se lamentó

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FOTO: MAIALEN ANDRÉS Felicidad Javier Urriza celebra su sexta txapela en el torneo Individual, la cuarta de manera consecutiv­a

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