“EN EL FÚTBOL HAY QUE TENER DESCARO Y MAL GENIO”
Ha sido una de las sensaciones de la temporada hasta el punto de que él mismo está sorprendido con su protagonismo. Pere Milla se ha hecho un sitio en la plantilla y en el ‘once’ del Eibar después de recorrer un largo camino que le ha llevado por todas las categorías del fútbol profesional y por diferentes equipos hasta alcanzar su sueño de debutar en Primera.
Da la sensación de que han comenzado de menos a más, ¿coincide?
Bueno, sí que los primeros partidos no puntuamos, pero el equipo jugó buenos partidos y ahora ha cogido esa racha de puntos que esperemos que continúe contra el Leganés.
Lleva tres partidos como titular. ¿Está sorprendido del protagonismo que ha cogido?
Sí porque no me lo esperaba para nada. Sí que trabajo para ello, pero es que aquí los compañeros tienen un nivel altísimo. Sin embargo, por hache o por be estoy jugando y toca aprovechar los minutos y seguir aprendiendo.
En verano sin embargo había dudas sobre su continuidad en la plantilla...
Yo vine con la idea de quedarme. En ningún momento nadie me dijo que tenían pensado que saliese fuera. Vine como uno más a trabajar y al final me quedé.
¿Le está costando adaptarse al ritmo de la Primera División?
Sí que el ritmo es diferente que el de otras categorías, pero poco a poco eso se va cogiendo y te vas amoldando.
Se le ha visto con cierto descaro en sus primera apariciones...
Siempre tienes que tratar de hacer las cosas fáciles, pero creo que los hombres de arriba somos los que en ocasiones tenemos que intentarlo porque, si no lo intentas, es seguro que no pasa nada. Hay veces que hay que probar porque considero que en el fútbol hay que tener descaro y mal genio.
Su camino hacia Primera División ha sido largo. Tiene 25 años y ha ido escalando categorías en diferentes equipos...
Bueno, es que esto es fútbol de primer nivel y llegar es complicado. Mantenerse mucho más. Por eso el día que debuté me acordé mucho de cuando era chiquitito, de mis compañeros, de la gente con la que jugué que no han tenido la suerte de vivir lo que yo estoy viviendo. Es un camino largo, difícil, pero estamos aquí y voy a tratar de aprovechar al máximo el tiempo que tenga.
Su trayectoria puede compararse con la del Eibar, ¿no cree?
Sí, te diría que sí. Soy un chico humilde, como lo puede ser el Eibar y que viene de abajo.
Recuerdo que cuando estaba en el filial del Getafe estuvo cerca de debutar con el primer equipo y sin embargo al final de temporada le dieron la baja. ¿Se quedó con esa espina clavada?
Sí porque estás ahí, cerquita, y piensas que quizás esa oportunidad no la vuelvas a tener nunca más, que quizás no vuelvas a estar en un vestuario de Primera, pero he tenido la suerte de formar parte del Eibar y debutar precisamente en Getafe.
¿Llegó a pensar que su tren había pasado?
No porque era joven y tenía muchos años por delante.
Una cosa que habla bien de usted es que sale de Getafe, con esa decepción, y sin embargo es capaz de reponerse y jugar su mejor temporada en el Logroñés...
Tuve la suerte de que el vestuario que había allí era magnífico e hicimos una muy buena relación, sobre todo con mi amigo Titi que se podría decir que en esto del fútbol me dio la vida porque al año siguiente lo pasé muy mal en el UCAM. Fue una temporada en la que estuve jodido y él y su familia me ayudaron mucho. Cómo me cuidó, cómo me trató y cómo me apoyó fue muy importante.
Tengo entendido que Mikel Orbegozo es otro de sus grandes amigos...
Sí. También. Cada semana solemos quedar. Es una maravilla la amistad que hicimos en el Getafe. Mikel es la hostia.
Pese a que aquella temporada en Logroño marcó 18 goles, usted no es un goleador al uso. Sin embargo lleva sin marcar desde marzo. ¿Le preocupa?
Bueno, los de arriba siempre estamos preocupados con intentar marcar o dar asistencias. Yo intento trabajar en el campo, ayudar al equipo y si doy una asistencia o marco un gol, mejor pero no estoy preocupado especialmente. Algún día llegará la hora de marcar.
¿Qué es lo que más le ha sorprendido del Eibar?
Sabía que era una familia, un club humilde y muy tranquilo pero es que es increíble. Lo que más me ha sorprendido es el vestuario que hay. Es espectacular. Espectacular.
¿Qué objetivos se marca?
Aprender porque hay un grupo increíble.
Y ¿qué me cuenta de Mendilibar?
Es una persona increíble. Muy cercano con el jugador. Un tío excepcional.
Hay compañeros suyos que viven en Bilbao o en Donostia. Sin embargo usted vive en Mondragón...
Sí, cerquita de Atxabalpe. En el vestuario se ríen de mí porque dicen que en Mondragón no hay nada, que no se puede hacer nada. Hacen muchas risas con eso.
Bueno, he leído que le gustan mucho los videojuegos..
Sí, juego bastante a la Play.
¿Sabe qué media le han puesto en el FIFA?
No, ni idea. Es que no juego mucho. Soy más del Fornite. Estamos todos ahí, dándole.
También he visto que como manía le gusta ponerse las medias al revés...
Sí.
¿Hay alguna razón?
Tiene una razón pero vamos a dejarla ahí...
Su ídolo es Raúl González...
Sí. Siempre he tenido debilidad por él. Desde chiquitito siempre he llevado el ‘7’ de Raúl