“Fue una paliza tremenda, acabé con dolores”
El joven ‘Arria VI’ comparte con MD las vivencias tras completar su primer pentatlón vasco con 19 años
La expectación fue inusitada y el trabajo de los cinco protagonistas, colosal. Los participantes en el primer pentatlón vasco tras una ausencia de 28 años deleitaron con sus habilidades con las piedras, la aizkora, las txingas y la resistencia a los más de 1.000 asistentes que poblaron la plaza de toros de Azpeitia la noche del sábado. Al margen de los v et eran osXabierZaldua, ganador, oLuisTxapartegi, que fue segundo,destacó la actuación del participante más joven, que además jugaba en casa. Con 19 años, ‘Arria VI’ logró terminar una prueba extremadamente dura, la primera de este tipo para él.
“Acabé con un dolor de espalda curioso. Fue una paliza tremenda”, relata Aritz Azpiazu a MD. El nieto de Arria II y sobrino de Arria V, que está empezando a hacer sus pinitos en el mundo aizkolari, abandonó el coso taurino casi a las dos de la mañana pero no llegó a casa hasta las ocho, con la luz del sol empezando a calentar las calles. “Me quedé hablando con los amigos y con varios vecinos, había mucha expectación y recibí ánimos por doquier”, cuenta. Los más importantes vinieron de boca de su madre, presente entre el público asistente para mantenerle con la moral alta. “Está acostumbrada porque su padre y su hermano están inmersos en esto y mientras mi salud no corra riesgo, es mi máximo apoyo”, comenta.
A pesar de lo que pueda parecer, su periplo nocturno no fue una celebración sino un periodo necesario para rebajar la tensión provocada por el esfuerzo. “Al acabar estaba muy cansado. Solo tenía ganas de beber agua y más agua”, subraya con una sonrisa. Eso sí, los 55 minutos que estuvo inmerso en la faena tardarán en escapar de su mente. “Mi primer objetivo era terminar y hacer un trabajo decente, limpio. Pero en arrastre de piedras tarde más de lo esperado porque me dio un tirón en la zona lumbar”, cuenta. De hecho, los nervios le pudieron pasar factura porque “el sábado anduve con mariposas en el estómago y noté el cuerpo más rígido de lo habitual”.
Las razones que le empujaron a participar son evidentes. “Cuando vi a mi tío preparándose, no me lo pensé”, cuenta. Tres meses de entrenamientos después, cumplió su cometido con creces. “Me he organizado con tres entrenamientos a la semana, uno muy duro con la piedra, del que me costaba recuperarme siempre, y otros dos combinando la carrera y la aizkora”, desmenuza.
Estudiante de Psicología
Azpiazu, que el verano que viene apunta al Campeonato de Aizkolaris de Gipuzkoa y Euskadi de tercera categoría, está compaginando la aizkora con la Universidad. “Estudio
Llegó a casa a las 8.00 después de recibir elogios y charlar con amigos y vecinos
No se lo pensó dos veces tras ver entrenar a su tío Xabier Orbegozo, ‘Arria V'
“Me dio un tirón en la zona lumbar durante el arrastre de piedra”, revela el azpeitiarra
Ensalza la imagen que se vio por televisión: “Se necesitaba un toque moderno”
Psicología en la facultad de la UPV en Donostia”, revela. El lunes se tomó un merecido descanso y no se montó en el autobús.
Consciente de que los herri kirolak no se viven igual en los pueblos y en la capital, sí admite que se ha “encendido una pequeña chispa” tras lo que se vivió el sábado por la noche en la plaza de toros de Azpeitia. ‘Arria VI’ pudo ver la prueba repetida el domingo en casa y no salía de su asombro con lo que vio. “Quedó todo precioso, con mil personas en la grada y mucho público joven. La televisión lo montó muy bien con las pantallas, los drones... y creo que era necesario darle un toque moderno a los herri kirolak”, reflexiona.
Con las ideas claras, está convencido de que repetirá si se vuelve a organizar algo semejante. “Claro que me gustaría”, lanza un emergente ‘Arria VI’. Ábranle paso