Al Liverpool le va el City
Los ‘reds' llevan tres partidos sin ganar pero el domingo reciben al equipo de Pep, rival favorito de Klopp
El Liverpool terminará su Tourmalet este domingo nada menos que contra el Manchester City, con el que se jugarán tres puntos importantes para consolidar la primera plaza de la Premier League. Lo harán en el momento más delicado para los de Klopp, que suman tres partidos sin conocer la victoria después de un calendario muy complicado y exigente, cayendo el miércoles ante el Nápoles en Champions League, mostrando su versión más gris.
Después de caer ante el Chelsea en Copa de la Liga y salvar un punto contra los ‘blues’ en los últimos minutos en liga, con un Hazard espectacular en contra, el cansancio acumulado por la plantilla ‘red’ hizo mella en Italia, donde prácticamente no se reconoció al equipo, que no llegó a realizar ningún disparo a puerta en San Paolo, cuando normalmente es un equipo muy vertical. Y no solo han sido estos los rivales, antes llegaron también Paris Saint Germain y Tottenham, saldados con sendas victorias.
No obstante, y aunque ni mucho menos han saltado las alarmas en Anfield por la entidad de los rivales contra los que el Liverpool ha caído, el hecho de que venga ahora el Manchester City, con una plantilla de relumbrón, puede ser visto con optimismo. Jürgen Klopp ha demostrado saber medirse a los equipos de Guardiola desde la época de ambos en el Borussia Dortmund y Bayern de Múnich respectivamente. El fútbol profundo de los ‘reds’ ya castigó al de posesión de los ‘citizen’, expuestos a las pérdidas de balón y los ataques rápidos de Klopp.
Un escenario que puede ser propicio para que el Liverpool recupere la senda de la victoria ya que, teniendo en cuenta los anteriores encuentros entre ambos conjuntos, se han saldado con victoria del lado ‘red’, los dos en Champions League que supusieron la eliminación del City y el último en Premier, un partidazo que se saldó con 4-3, resultado que firmaría Klopp a día de hoy.
Firmino temió por su ojo
Roberto Firmino confesó haber tenido miedo de quedarse ciego de un ojo después de su incidente con Jan Vertonghen en el partido ante el Tottenham, en el que recibió un golpe y tuvo que marcharse al hospital. “Tenía miedo de quedarme ciego de un ojo y no volver a ver nunca más. Gracias a dios nada ocurrió y fue mejorando gradualmente. Me he estado tomando mi medicación y cuidándome porque los ojos son muy importantes cuando eres futbolistas profesional”, confesó