Carrusel de puntos desde América
Lyndra Weaver y Garrett Nevels están llamados a liderar las anotaciones del IDK Gipuzkoa y GBC en esta nueva temporada
Todos los equipos suspiran por ese jugador o esa jugadora estadounidense que pueda aportar un carrusel de puntos en cada partido, que pueda tirar del carro en los momentos más críticos con su acierto envenenado y sacar de cualquier aprieto a los compañeros. Sea cual sea el origen de los problemas. Es el dilema de prácticamente cualquier club no americano y que, evidentemente, también afecta a los dos principales estandartes guipuzcoanos.
El IDK Gipuzkoa y el Delteco GBC realizaron un exhaustivo trabajo de reclutamiento para encontrar el perfil deseado. Azu Muguruza ya lleva un año contando con la energía de Lyndra Weaver, una polivalente jugadora de Washington que se ha colado entre las estrellas de la Liga Día y que en los albores de su segundo curso en Donostia confía en dar un pasito más a nivel individual y colectivo.
“El objetivo es volver a la Copa, a los playoffs por el título y, si se puede, mejorar lo que conseguimos hace unos meses”, comenta Weaver a MD. “Quiero ganar a Perfumerías y Mann Filter. Aunque solo sea una vez”, mantiene.
Con un vestuario sin apenas caras nuevas, la americana insiste en que “podemos hacerlo porque tenemos a las mismas jugadoras y solo ha venido Vionise PierreLouis”, un ‘cinco’ que en el IDK se echaba de menos.
“Le gusta jugar debajo del aro y nos va a dar algo que no tuvimos la pasada temporada”, reconoce la protagonista de este reportaje.
Weaver no siente demasiada carga sobre sus hombros. Tiene una tarea asignada y va sin reparos a cumplirla. “No siento ninguna presión, no. Cada jugadora sabe su trabajo concreto. A veces son cosas diferentes, pero en mi caso anotar siempre es una de ellas”. Con la ayuda de Azu, que “me ha puesto en una situación muy cómoda”, Weaver saca a pasear un talento difícil de frenar por las contrarias. “Es mi segundo año y sé cuales son mis responsabilidades. Solo salgo a jugar para ver lo que puedo hacer, calibrar la defensa y confiar en que el balón acabe entrando”, aclara.
Curiosamente, el largo descanso que existe entre el final de una temporada y el inicio de la siguiente ha permitido a Weaver vivir una experiencia de lo más curiosa en Angola este verano.
“Me avisó mi agente que había una oferta muy buena para jugar dos meses y la acepté. Al final fueron tres, con pocos días de descanso y mucho trabajo en el gimnasio. ¡Perdí cuatro kilos!”, comenta con una sonrisa.
Encantada porque en Donostia “la comida es sensacional y hay mucho marisco como en Washington”, Weaver es una donostiarra más. El IDK abraza su aportación y entrega dentro y fuera de las canchas.
Nevels, la pólvora angelina
La completa renovación del Gipuzkoa Basket ha acabado con Garrett Nevels en Illunbe. Con experiencia previa en LEB con el Albacete y el Lleida, el escolta nacido en Los Ángeles pide calma tras el 0-3 inicial. “Soy optimista sobre lo que podemos conseguir. Tenemos que seguir trabajando
duro y aprendiendo nuestros roles”.
Feliz por poder tener minutos en ACB, “donde quería jugar y demostrar lo que valgo”, Nevels sostiene que “el entrenador quiere que sea el mejor defensor y que lea bien el juego en modo ofensivo”.
Sus 22 puntos contra el Baskonia mantienen viva la llama de la esperanza. Parece que el GBC ya tiene un tirador nato y fiable. “Me gusta la responsabilidad y trabajé toda mi vida y durante este último verano para tener esta oportunidad”.
Emigró desde la NCAA a Europa hace unos años sin remordimientos. “No lo veo como un paso atrás sino que fue una opción para empezar desde abajo”. De momento, el rodaje prosigue en un vestuario que necesita relucir ya