La Real se da un homenaje a costa del Antiguoko
El Eibar se recupera batiendo a domicilio al Pamplona
La Real no le dio opción al Antiguoko en todo el partido. Los txuri urdin fueron superiores desde el inicio y acabaron endosando un ‘set’ a su rival de ayer.
La Real juvenil goleó sin despeinarse en el derbi guipuzcoano de División de Honor Juvenil que tuvo lugar en Zubieta, y para el descanso ya ganaban 4-0. De esta manera encadenan su quinta victoria consecutiva, lo que les permite seguir la estela del líder Danok Bat que cuenta las ocho jornadas disputadas por victorias. Con seis triunfos en ocho partidos, los blanquiazules están a seis puntos de los vizcaínos con los que aún no se han enfrentado.
Kortajarena y Barrenetxea, con dos goles cada uno, lideraron el festín anotador de los blanquiazules, completado por Carbonell y Ander Martín. El primer tanto llegó en el minuto 19, aunque hubo ocasiones para haber sido antes, mientras que el segundo tuvo lugar en el 27’ gracias a un buen disparo de Carbonell tras un rechace de córner.
En el primer tiempo todavía se vieron dos goles más. El primero de ellos fue en el minuto 37 por medio de Barrenetxea, mientras que el cuarto lo transformó Ander Martín tras una jugada de estrategia a balón parado que el jugador txuri urdin acabó enviando al fondo de las mallas. En la segunda parte llegó el 5-0 que marcó Kortajarena y el sexto y último, en el 58’, también con doblete de Barrenetxea.
La Real, con estos seis goles, es de largo el equipo más goleador del grupo mientras que el Antiguoko se mantiene a un punto de los puestos de descenso.
El Eibar sufre al final
El Eibar se rehizo de la derrota del derbi contra la Real con una importante victoria en casa del Pamplona. Los armeros completaron un muy buen primer tiempo, con mucho control y profundidad. Argente abrió el marcador tras aprovechar un saque de esquina botado por Hidalgo y después fue Pablo Santiago el que ajustó un lanzamiento al palo corto tras un buen cambio de orientación de sus compañeros.
El Pamplona aprovechó el descanso para resetear y elevar el nivel ofrecido hasta ese momento, provocando ciertos apuros al Eibar. Yoldi recortó distancias a cinco minutos del final y los armeros acabaron pidiendo la hora porque los locales apretaron en busca de un empate que afortunadamente no llegó