Víctor Sada se despide de las canchas en una rueda de prensa muy emotiva
El que fuera base del Barça dio las gracias a la familia, compañeros, amigos y destacó a tres entrenadores: Pesic, Pedro Martínez y Pascual
Víctor Sada llevaba tiempo sin jugar pero no fue hasta ayer que anunció de forma oficial su retirada del baloncesto. “Quería hacerlo así básicamente para dar las gracias. Gracias al Barça poder hacer acto aquí, considero el Palau mi casa. Tengo 34 años y he pasado 17 en el Barça, es media vida. Gracias también a las personas, jugadores, amigos...”, apuntó al inicio de un largo discurso que logró emocionar a todos los presentes.
Sada hilvanó en la sala de prensa del Palau un parlamento a la vez emotivo y muy divertido, dibujando uno de los actos de despedida de un jugador más memorables en mucho tiempo.
“Le dije a Joe Ingles que cuando me retirara no echaría de menos los ejercicios de Toni Caparrós pero al final sí los echo de menos. También le dije a Juanqui (Navarro) que cuando tuviera 34 años me plantearía si retirarme o no, y lo he cumplido y aquí estoy. Los últimos años de un jugador son duros y los míos lo han sido. Cuando salí de Andorra se me puso la cruz, y no era la de Sant Jordi. Tuve una situación con mi pareja muy dura y decidí quedarme a su lado y ayudarla en lo que hiciera falta. La vida es mucho más importante que el basket, aunque en él nos dejemos la vida. Tuve dos ofertas importantes pero las rechacé. Lo volvería a hacer, Elena”, continuó Sada repasando los duros últimos años de su carrera.
El badalonés reconoció que “me hubiera gustado acabar mejor mi carrera pero hay que mirarlo con perspectiva. Es como la serie Perdidos. Cuando empiezas a verla no te acaba de gustar , como mi arranque en el Barça, pero luego llega Girona, más años de Barça y ya te está gustando. Y como en Lost, a mucha gente no le gustó el final pero a mí me gustó y este también. Os he reunido aquí para deciros de manera oficial que me retiro como jugador profesional. Cierro la paradita. Estoy haciendo las cosas que no podía hacer cuando me quejaba del calendario de ACB y Euroliga. La verdad es que me lo he pasado muy bien haciendo lo que me gustaba, jugar a baloncesto, jugar contra los Lakers, contra Kobe, abrazar a Magic Johnson, jugando con los compañeros en el avión al Mario Karts...”, explicó.
Sada, entonces, empezó a dar las gracias. Y no se dejó a nadie. “Gracias a mucha gente, empezaré por mi familia, que me han seguido por todas partes. A mi madre, que es mi fan número uno. A mi padre, soy como soy en el basket gracias a él. A mis hermanos, que cuando comencé en el basket eran mis ídolos, ahora no tanto. Fue un placer verles jugar desde pequeño. Llevábamos el ADN basket y Barça de serie”, ha empezado.
Después pasó a sus entrenadores. “Coach Pesic es como mi padre del baloncesto, en la temporada del triplete venía mucho a vernos al Barça B y al año siguiente nos subió al primer equipo. Otro entrenador que me marcó fue Pedro Martínez, al principio tuvimos algunas diferencias pero lo hablamos y acabamos muy bien. Y después con Xavi Pascual, con el que pasó al revés, al principio congeniamos muy bien y al final las cosas no acabaron de ir como nos hubiera gustado que fuesen. Pero le doy las gracias por haber apostado por mí”