Iulene Olabarria regresa a las canchas 11 meses después
“Me puse muy nerviosa”, reconoce
Iulene Olabarria protagonizó la noticia positiva del fin de semana en el IDK Gipuzkoa. Más allá de la victoria cosechada ante el Sant Adriá, la tercera de la temporada, el regreso de la capitana 11 meses después de lesionarse gravemente la rodilla supuso un subidón para una plantilla que ansiaba la vuelta de la triplista guipuzcoana. Una vuelta a las pistas que dejó “muy buenas sensaciones” a la protagonista. Olabarria reconoce que se puso “muy nerviosa porque pensaba que no iba a jugar el partido” y sin embargo entró en el quinteto inicial. Poco tardó en dejar su sello porque abrió el marcador con un triple: “En cuanto me llegó la bola, estaba sola y sabía que tenía que tirar y entró”. Una jugada que le ayudó a “quitar esos miedos”. La lesión queda olvi- dada tal y como afirma la escolta: “De la rodilla no tenía dudas. Se te carga antes la zona, la tienes un poco hinchada, pero no he tenido problemas”.
No esperaba la capitana tener minutos en el encuentro del pasado domingo, pero sí “debutar en casa” ante el Mann Filter, extremo que no se produjo. Admite que “Azu me irá viendo, pero en defensa estoy lenta todavía. Sabemos que defender es importante, soy autoexigente así que si no tengo que jugar no se juega”. Lo relevante es que el equipo continúe en la dinámica positiva en la que está. Para ello el IDK Gipuzkoa se apoyará en Weaver y Sarr, dos de las mejores jugadoras de la competición. “Weaver tiene que ser nuestro puntal. El año pasado lo era y este año ha venido más suelta”. En el caso de la senegalesa “Sarr ha vuelto del Mundial muy arriba, le dará el bajonazo antes que al resto pero hay que aprovechar que lo está metiendo todo”
A por la cuarta
El equipo de Azu Muguruza buscará el sábado su cuarta victoria de la temporada ante un Valencia que no sabe lo que es ganar, pero que “ha jugado contra los equipos top de la liga”. Olabarria señala que “va a ser un partido muy duro” porque realmente se trata de un proyecto hecho “para estar arriba, veremos si funciona”. Las valencianas quieren “reinar como lo hacía el Ros Casares, pero es el primer año que vuelven” a la máxima categoría. No será un duelo fácil