‘Síndrome de empate’ en San mamés
Athletic y Valencia dirimieron un partido aburrido y sin apenas ocasiones de gol , firmando unas tablas que no alivian sus respectivas penurias
San Mamés acogió ayer un duelo que precisamente no pasará a la historia del fútbol vistoso, con Athletic Club y Valencia firmando tablas sin goles y sin apenas ocasiones para lograr los mismos.
Berizzo sorprendió a propios y extraños con su alineación. El técnico argentino dejó en el banquillo a Muniain, Williams y De Marcos, entre otros, para dar entrada a San José, Mikel Rico y Capa, respectivamente. El técnico argentino apostó en San Mamés por una dispo- sición táctica (4-5-1) y unos jugadores más propios de campos como Ipurua y Vallecas, sus dos últimas salidas. Raúl García, el revulsivo bilbaíno ante el Rayo, le tocó esta vez hacer de interior zurdo.
Marcelino, con la misma necesidad de puntos que los locales o parecida, tiró del bloque titular de días antes en Suiza en la Champions. Vezo y Garay entraron así en la zaga y Coquelín actuó por delante de Gayà. El Valencia fue fiel a su 4-4-2 habitual.
Los leones salieron con ganas y en poco más de medio minuto hicieron mayor peligro que en todo el resto del primer tiempo. Capa tuvo en sus botas hasta dos claras opciones consecutivas ante Neto, pero sus tiros carecieron de veneno. Un balón al que prácticamente abrazó Garay dentro de su propia área provocó la petición de penalti de los locales. Undiano Mallenco no vio nada punible. El VAR, tampoco.
Los che, sin hacer nada del otro mundo, se fueron al descanso con las mejores oportunidades en su haber. Batshuayi pecó de inocente tras quedarse solo ante Iago Herrerín y Kondogbia tiró rozando el poste minutos más tarde. La fría y aburrida primera parte de San Mamés no dio para más.
El encuentro, cada vez más pasado por agua, se animó en la segunda mitad. El Athletic tuvo sus opciones en sendas llegadas de Rico y Yuri. El Valencia, con Gameiro por Batshuayi, tardó en animarse en ataque, pero su primera aproximación a punto estuvo de culminarla Parejo tras una gran acción colectiva.
Berizzo optó por recurrir a Williams para sustituir a un poco activo Aduriz. Marcelino tiró de Wass. Los leones, sin descuidarse atrás, insistieron en sus llegadas en ataque. Los visitantes, que reclamaron un penalti poco antes de que le anularan un gol a Gameiro por fuera de juego, tampoco renunciaron a las suyas. Muniain entró acto seguido por Rico, pero a la postre la permuta no obtuvo el resultado necesario ni sirvió para deshacer el 0-0.
Los leones, pese al riesgo que suponía lanzarse en ataque, trataron en todo momento de batir la portería de Neto. La velocidad de Williams les ayudó a desatascar la zona de combinación. Las entradas de Capa por la banda derecha, también. Berizzo apostó en los últimos minutos por el concurso de Unai López.
Raúl García la tuvo
Otro cambio en el tiempo de prolongación, aunque este a punto estuvo de surtir efecto. Raúl García la tuvo a un suspiro del final, pero su tiro a bocajarro fue desviado por Neto. Otro empate, por tanto, y punto.
Después de este insuficiente empate que no apaga la crisis el Athletic visitará el próximo lunes 5 de noviembre a un Espanyol enrachado que promete crearle muchos problemas a los de Berizzo. El Valencia, por su parte, abonado al empate habiendo firmado 8 igualadas en 10 partidos de lo que va de Liga, recibirá a un Girona revitalizado
Los leones suman siete igualadas mientras que el conjunto ché acumula una más