Volverá a ser un día especial
De pequeño siempre soñé con llegar a ser como Arconada, como la mayoría de niños de mi generación, que aspiraban a vestirse de corto, ponerse los guantes, alguna de sus recordadas camisetas y emular al gran guardameta con esas paradas antológicas. Pero una vez me di cuenta de que eso sería imposible de alcanzar, empecé a soñar con algo más terrenal: quería convertirme en periodista para contar las vivencias de mi equipo. Dijo Xabi Prieto que él no quería ser futbolista, que él quería jugar en la Real. Yo no quería ser periodista, quería escribir de la Real Sociedad. Pero para lo segundo, por lo menos en un tiempo no muy lejano, había que conseguir lo primero. Costó más de la cuenta, pero lo pude lograr y para el arriba firmante es un privilegio poder seguir haciéndolo de la mano de Mundo Deportivo Gipuzkoa, que cumple 20 años. Hoy volverá a ser un día especial, como cada vez que hay partido. Y lo será más aún si el conjunto blanquiazul es capaz de sumar la que sería primera victoria de la temporada en el nuevo Anoeta, que, de momento, se está mostrando un tanto hostil a los intereses realistas. Ya son cuatro los rivales que han pasado por Amara y la Real se ha mostrado incapaz de cantar victoria. No solo eso, sino que además ha hecho méritos más que de sobra para que los triunfos no hayan llegado. Y eso quizá sea lo más preocupante de todo lo acontecido hasta la fecha. Bueno, y todos los infortunios, en forma de lesiones, que sigue padeciendo el primer plantel y que ha hecho que algunas de las estrellas del equipo todavía no hayan hecho acto de presencia como es el caso de Adnan Januzaj, al que se le sigue esperando. El belga jugó en Balaídos de inicio por primer vez después de mucho tiempo. Tampoco se ha visto, en lo que se lleva de temporada, la mejor versión de Willian José, ni tampoco la de Sandro ,nilade Illarra ,ni la de Zurutuza ,nilade Theo ,nilade Merino... Y así la misión se antoja complicada para un equipo que necesita como el comer una victoria. Y ahí estará Mundo Deportivo Gipuzkoa para contárselo