INEXPLICABLE
El Eibar desaprovecha un 0-2 en el 86’, con un jugador más, y suma un punto que sabe a poco Sensacional partido del conjunto armero en el Sánchez Pizjuán que no encuentra el premio del triunfo
Inexplicable lo sucedido en el Sánchez Pizjuán. El Sevilla salvó un punto sobre la bocina o más bien el Eibar perdió dos puntos cuando ganaba 0-2 en el 86’ y jugaba con un futbolista más. Ben Yedder y Sarabia igualaron los goles de Orellana y Charles. Ver para creer.
El Eibar salió sin complejos al Sánchez Pizjuán. Quiso atemorizar a los guipuzcoanos el Sevilla con un disparo cruzado de Sarabia a los dos minutos, pero fue un espejismo. Los armeros se adueñaron de la posesión y fueron ganando metros a los hispalenses. Una presión bien ejecutada y el balón parado -cuatro córners en los primeros 15 minutosprovocaron que el partido se jugase en el campo del Sevilla. Los de Mendilibar no se complicaron la vida, entre otros motivos porque llegaron con facilidad al arco de Vaclik. A los ocho minutos avisaron por medio de Diop tras un cambio de banda de Jordán y la brillante jugada en banda derecha de Orellana, que le hizo un caño a Kjaer y superó a Escudero para ceder al senegalés, que envió el balón alto. Pero fue a los 21 minutos cuando el Eibar silenció la grada sevillista. Orellana recogió un balón al borde del área tras un mal control de Roque Mesa, regateó a Kjaer, aguantó con el cuerpo a Carriço y superó por alto a Vaclik. Con el resultado a favor, el Eibar cedió terreno y el Sevilla lo aprovechó. Los de Machín comenzaron a encontrar agujeros en la defensa armera gracias a los buenos movimientos de sus delanteros. Tanto Ben Yedder como André Silva buscaron la espalda de la zaga guipuzcoana y cerca estuvieron de encontrar premio.
Una locura de final
Al Sevilla no le quedó otra que apretar y lo hizo. A los 45 segundos había forzado un córner. Sin embargo, al contrario que en la primera mitad, el primer aviso serio fue visitante. Orellana entró en el área, regateó a Escudero y su centro chut no encontró rematador en el 48’. Los hispalenses reaccionaron y rozaron el gol en dos ocasiones. Primero con un cabezazo blando de Kjaer que atajó Riesgo y seguido con un chut de André Silva tras una brillante jugada de Ben Yedder y Sarabia, ruleta marsellesa incluida.
Pero en el mejor momento de los locales llegó el segundo de los guipuzcoanos. Jordán botó un córner al segundo palo para que Arbilla pusiera el balón al corazón del área donde Charles entró como un obús para enviar el esférico a la red. 0-2 y la moral del Sevilla por los suelos. Al Eibar le bastó con estar ordenado, con mantenerse unido y no dar espacios a su rival. La expulsión de Banega, desquiciado, fue reflejo del encuentro.
Entonces llegó el gol de Ben Yedder que lo cambió todo. Cuando el partido parecía sentenciado, Sarabia filtró un balón al delantero, que superó a Riesgo en el 87’. El gol sentó como un jarro de agua fría a los armeros, que no levantaron cabeza. En el descuento, un centro de Promes que Sarabia tocó para poner el 2-2 llevó la locura a las gradas del Pizjuán que incluso soñó con la remontada. No hubo tiempo. El Eibar terminó pidiendo la hora