Retiradas las medallas a Franco
Durante la reunión ordinaria de ayer en el Camp Nou, la junta directiva del FC Barcelona, con su presidente Josep Maria Bartomeu al frente, acordó dejar sin efecto las distinciones otorgadas al general Francisco Franco en 1971 y 1974, y todos los efectos honoríficos vinculados a su entrega. El acuerdo deberá recibir la ratificación por los socios compromisarios en la próxima Asamblea, en otoño de este año.
Ante las insistentes demandas de los socios durante años, la junta ha querido traducir en hechos su compromiso de revisar el caso desde un punto de vista histórico y documental, asumido ante la Asamblea de Compromisarios como ya se había empezado a hacer en 2003 y se había retomado en 2011. Así lo explicó el portavoz azulgrana, Josep Vives, quien recordó el contexto histórico. El 13 de octubre de 1971, casi toda la junta de Agustí Montal i Costa entregó a Franco la medalla de oro conmemorativa de la inauguración del Palau Blaugrana por haber colaborado en su construcción. Raimon Carrasco, entonces secretario del club e hijo de Manuel Carrasco i Formiguera, dirigente de Unió Democràtica fusilado en 1937 por Franco, no viajó a Madrid.
El 27 de febrero de 1974, también en el Palacio del Pardo, le dio la medalla de oro conmemorativa de las bodas de platino del club, obligada por la norma no escrita que implicaba que las distinciones de nueva creación siempre debían otorgarse por primera vez al Caudillo. El FC Barcelona había otorgado por primera vez la medalla de oro del club, de nueva creación, a la Peña Blaugrana de Manresa, como organizadora del primer encuentro de peñas barcelonistas en Montserrat. Ante el requerimiento de las autoridades de la época, el club frenó la distinción a la Peña y creó una nueva medalla que se entregó a Franco a la semana de los actos de Manresa y tres días antes de la ejecución de Salvador Puig Antich.
“No hay ningún acta de la junta directiva en que haya constancia de que se le concedía esa medalla a Franco pero aunque documentalmente no sea así, de facto sí lo es porque sí hay pruebas gráficas de que así fue”, apuntó Vives, quien hizo hincapié en el trabajo exhaustivo del Centre de Documentació del FC Barcelona para dar luz a este caso: “Queríamos llegar hasta el final”.
El portavoz insistió en que la decisión de otorgar dichas distinciones por el FC Barcelona a Franco, jefe del Estado español entre 1939 y 1975, “fue una situación obligada y forzada por los acontecimientos políticos de la época. El club entregó una medalla que no quería entregar”.
En cuanto al juicio a los políticos independentistas que arranca hoy en el Tribunal Supremo, Vives reiteró la posición del Barça: “El club siempre se ha manifestado en contra de la prisión preventiva y ha apostado siempre por resolver esta cuestión por el diálogo y no por la vía judicial”. Además, censuró nuevamente la situación de prisión preventiva de Sandro Rosell durante los últimos 21 meses