“No le deseo a nadie lo que viví”
➔ José Manuel Oiarbide, delegado de San Pedro, fue testigo directo de la resolución de la ‘foto finish' que decidió la regata en Bueu
➔ San Pedro evitó en Galicia el descenso directo a la ARC-1 gracias, en gran medida, a la ‘foto finish’ que decidió el pulso entre Astillero y la ‘Libia’ en Bueu. Seis centésimas favorecieron a los morados. Una nimiedad al cruzar la línea de meta que tiene un valor incalculable para los guipuzcoanos. José Manuel Oiarbide, delegado de San Pedro, vivió en primera persona la toma de decisión, muy cerquita de los jueces, y lo tiene claro. “No le deseo a nadie estar cómo estuvimos nosotros allí”, relata para MD.
Lo cierto es que fue una jornada de mucho desgaste mental, no apta para cardíacos. “En el último largo hubo un momento en el que llevábamos alrededor de tres segundos a Astillero. Pero sufríamos”, continúa. “Al entrar en meta, en directo, me pareció que cruzábamos por delante. Pero ahí piensas más con el corazón que con la cabeza. Otro directivo que estaba conmigo se acercó a donde los jueces, que al principio nos dieron la ventaja a nosotros, pero Astillero había pedido la ‘foto finish’, recuerda Oiarbide.
Cuando el delegado vio la instantánea, asomó la certeza. “El directivo me transmitió que no había ninguna duda y enseguida llamé a la zodiac, porque el patrón Ander Etxegoien no paraba de preguntar por el pinganillo”, explica. “¿Los nervios? Imagínate. ¿Las pulsaciones? Todas las del mundo. Estaba super nervioso”, confirma.
Por si fuera poco, en la foto finish “hay una bandera que, si llega a estar un poco más alta, hubiera impedido ver la entrada de Astillero y entonces habríamos tenido más que palabras”, revela.
Tampoco fue un día sencillo el del domingo en Boiro, ya que a la ‘Libia’ le tocó remar en la primera tanda y después esperar a Ondarroa en la esgunda. Por momentos se vieron perdiendo la categoría ya que “en el último largo Ondarroa llevaba una diferencia de 10 segundos y empezó a bajar“, explica. “Etxegoien dice que con esa presión no llega a los 50 años. Yo le creo”, comparte Oiarbide.
La Concha, en segundo plano
José Manuel Oiarbide Nuestro patrón Ander Etxegoien dice que con una presión así no llega a los 50 años y yo le creo”
En ‘la foto finish' hay una bandera que si está un poco más alta no se hubiera visto la entrada de Astillero. Entonces sí que hubiera habido más que palabras”
La Concha coge ahora el testigo. La criba del jueves determinará quién pelea por la Bandera los próximos dos domingos. La ‘Libia’ intentará quedar entre las siete primeras pero, de momento, “ni me acuerdo de la clasificatoria”, reconoce Oiarbide. “En los tres días que hemos estado en Galicia nos acordamos de que está ahí pero como si no existiera”, explica.
Y es que “la Concha es la Olimpiada del remo pero, como no estés en la Liga, olvídate del remo. Esa es nuestra lucha. Si no estás en ACT la Concha es una regata más. Hoy en día, como decía Toshack, el pan y la mantequilla la da la Liga y tiene toda la razón del mundo”. apunta el delegado sanpedrotarra.
A pesar de todo, la trainera morada afrontará la prueba más importante del mundo del remo “con ilusión y con todo. Pero es el entrenador quien tiene que decidir cómo afrontarla. Sí que nos gustaría entrar”, declara Oiarbide. Y si puede sufrir menos que en Bueu, mucho mejor ●