El debutante Sangalli hace más en 19 minutos más que todo el resto
Fue el clásico partido en el que ningún realista mereció la denominación de ‘el mejor’. Por lo menos a los que perpetraron la peor primera parte en Bilbao que se recuerda en la última década. Por lo tanto, es de ley concederle la distinción a Luca Sangalli, que salió en el minuto 78 e hizo más en 19 minutos que casi todo el resto en más de 100. Por fin apareció alguien que rompió conduciendo, que profundizo en alguna ocasión por la banda y que ¡chutó a puerta! El donostiarra, en su estreno esta temporada, fue el autor del primer disparo a puerta ¡en el minuto 83! Luego firmó otro Odegaard en el 52 de la segunda parte ● El derbi de San Mamés fue el mejor ejemplo de una noche para el olvido, una de esas jornadas aciagas en las que la Real entra con el pie izquierdo al partido y no consigue sacarlo por mucho que lo intente. Como un pozo cuyo fondo se aleja más y más cada minuto. Nada de lo que estaba planeado, empezando por un planteamiento que naufragó a las primeras de cambio, precisamente en esos minutos iniciales en los que el Athletic afila los colmillos y muerde como nadie, asomó en casa de los vecinos. La Real quiso responder a los rugidos y apenas emitió un indefenso maullido, una caricia. El cortocircuito, que se fue expandiendo como una plaga, arrancó con el resbalón de Aihen en el 1-0 y continuó con la pasada de frenada de Zaldua, que hizo méritos para dejar a los de Imanol con diez antes del descanso. El Athletic impuso su jerarquía, amagó con noquear a la Real y estuvo a punto de expulsarla de San Mamés. Ni siquiera la bronca de Imanol en el descanso, al que se llegó con un horripilante 8-0 en tiros a favor de los rojiblancos, cambió el rumbo de un derbi al que se le tenía ganas después de los mensajes que cruzaron la AP8 durante la semana. No hubo un atisbo de reacción. Solo Portu e Isak pusieron su granito de arena para tratar de encender a los suyos. No lo hizo Willia, que no se debió de dar cuenta de lo que ocurría abandonar el campo andando con un 2-0 en contra ●